Un aberrante hecho de maltrato infantil conmueve a la ciudad de Córdoba. Una madre denunció penalmente a la niñera de su bebé de siete meses, tras descubrir, mediante las cámaras de seguridad instaladas en su casa, que la mujer maltrataba al pequeño. La niñera, que había sido contratada a través de una empresa especializada, fue imputada por el delito de lesiones leves.
“Me ha afectado la vida, el sueño, todo, porque me acuerdo de las imágenes y lloro”, relató la madre, aún conmocionada. Según explicó, antes de contratar a la cuidadora, había realizado un proceso exhaustivo: entrevistó a varias candidatas de manera virtual, revisó currículums y contactó las cinco referencias laborales que presentó la imputada, todas las cuales ofrecieron buenos antecedentes.
La madre contó que el incidente ocurrió cuando su hijo tenía casi cinco meses. En ese momento, no había notado señales que despertaran sospechas, ya que la niñera cumplía con sus horarios y obligaciones. Sin embargo, comenzó a tener un mal presentimiento, reforzado por la actitud de su hijo mayor, de dos años y medio, quien nunca quiso quedarse a solas con la cuidadora y llegó a decirle: “Para mí es mala la señora”.
Tras estas señales, la mujer decidió revisar las grabaciones de las cámaras y lo que vio la dejó aterrada. “Le da una cachetada que le da vuelta la carita, lo tira al colchón, lo revolea como si fuera un muñeco, de una mano, de un brazo”, describió entre lágrimas. Inmediatamente alertó a su esposo, a una vecina y al guardia de seguridad del barrio, y apartó a la niñera del lugar.
La madre agregó que hay más videos que no ha podido ver por el impacto emocional que le provocan. “En uno, ella le hunde su cabecita contra el colchón. Yo esa mañana sentí que me lo mataba. Fue un horror”, aseguró.
El bebé fue sometido a estudios médicos que confirmaron que se encuentra en buen estado de salud. Por su parte, la empresa que proveyó a la niñera se puso a disposición de la familia y ofreció iniciar una nueva búsqueda sin costo, propuesta que la madre rechazó de plano. “No voy a meter más a nadie acá. Esto es una pesadilla. Yo quiero que esta causa se mueva, que no quede en la nada”, concluyó.