Microcentro en alza, Puerto Madero en baja

Hace tiempo el cordón norte del conurbano bonaerense se instaló como una buena opción para oficinas. Sin embargo muchos siguen eligiendo los viejos edificios en el Microcentro. Puerto Madero hoy parece ser parte del pasado.

La típica oficina ubicada en el Microcentro porteño parece no tentar a las principales empresas. Hace tiempo las compañías empezaron a instalarse en la zona norte del conurbano bonaerense y el sur de la Capital intenta ganar adeptos, en un barrio que, según los especialistas, tiene mucho potencial de crecimiento. No se trata solo de buscar espacios más verdes, sino de economizar gastos en época de bolsillos flacos.

“Los precios del metro cuadrado en Libertador tienen valores similares a los que se piden en el Microcentro porteño, pero toda la zona de oficinas que se ubica en la Panamericana se ofrece a la renta más económica. Igualmente hay que tener en cuenta que los impuestos en la zona norte suelen ser más caros, estos son todos ítems que las empresas estudian antes de decidir en dónde instalar su compañía”, explicó a Biz Pablo Manes Marzano, director de CBRE en Argentina.

Los contratos de alquiler son con un plazo mínimo de 5 años y en la mayoría de los casos se realizan en dólares ya que muchas empresas tienen capitales extranjeros. “La demanda fue pareja durante todo 2017, sufrimos un incremento considerable en 2016, pero se mantuvo todo el año pasado y creemos que habrá un alza en 2018”, agregó al respecto Manes Manzano en un café en exclusiva con Biz.

De acuerdo con la proyección de metros cuadrados nuevos a ser entregados durante el año, en conjunto con una pujante demanda, el resultado será una tasa de vacancia baja que puede llevar a un sobrecalentamiento de los precios y menor flexibilidad en las negociaciones, según se destaca en el informe de Tendencias del Mercado de Oficinas de Buenos Aires elaborado por CBRE Argentina.

Según el análisis del cuarto trimestre de 2017, en términos de oferta de nuevos metros cuadrados, esta variable está vinculada a los proyectos que ya fueron lanzados hace 3/4 años, y arrojó cifras similares al año pasado (110.000 m2 aproximadamente), estableciendo un nuevo piso en 90.000 m2 de producción anual. A futuro, la oferta de oficinas continuaría con esta tónica, gracias a numerosos proyectos de grandes dimensiones.

Respecto de la segmentación de la demanda, la misma se focalizó en los edificios más nuevos y de mayor categoría de todo el mercado. Dichas transacciones convalidaron precios al alza e incluso desplazando el techo de valores máximos de alquileres, mientras que los espacios que se vaciaron fueron de menos categoría. Esta tendencia responde al fly-to-quality. “Los amenities son un diferencial que muchas veces buscan desde las empresas para poder brindarle beneficios a sus empleados. Este tipo de edificios son los nuevos que se ubican sobre todo en la zona norte de Buenos Aires o en los barrios del norte de la Capital como Saavedra o Villa Urquiza”, agregó Manes Manzano.

Fuente:

Notas Relacionadas

Dejá tu comentario

Las Más Leídas del Patagónico