“Un proyecto tiene que ver con prevención que trabajamos junto a Educación y Salud, con quien trabajamos en conjunto políticas que venimos “bajando” en diferentes escuelas de la provincia”, dijo en Cadena Tiempo.
“A la reforma de la ley la dirigimos un poquito más hacia la ludopatía porque la ley anterior era amplia y no se cumplía desde 2012. Es importante cumplir esta ley que hace muchísimos años no se cumplía. Es necesario modernizar y transparentar un montón de actos que en la ley anterior no se cumplían o había que retornarlos”.
Ibarra indicó que la ley debería promulgarse. “Tiene que ver con nuevos negocios que vemos que el mercado ofrece en cuanto al online. Y allí hay una discusión de si está bien o está mal publicitar. Se puede publicitar de manera responsable, y si no se publicita legal, crece el juego ilegal que es donde están los criminales”, reconoció el funcionario del IAS.
Explicó que va en aumento la cantidad de menores que comienzan a jugar mediante el uso de plataformas privadas, sin ningún tipo de control. “A veces nos dicen que estamos de los dos lados del mostrador porque somos un ente regulador. Todo lo que es legal se puede controlar y tener información. Pero todo esto ocurre en un marco en el cual no accedemos con información, por ende no podemos tomar medidas. Y en ese sentido avanzamos con la justicia en un convenio a través del cual se hicieron doce denuncias finales que derivaron en doce allanamientos”.
“El gobernador nos ha pedido que no lleguemos a la prohibición sino que avancemos hasta llegar a los niveles máximos de esta pirámide. Uno no sabe dónde podemos terminar. Hay un montón de personas que se ofrecen y se llaman cajeros para ingresar a las plataformas de juegos ilegales. Es como un trabajo, porque el dueño de las plataformas se los ofrece así, cobran una comisión por hacer esto y al dinero después lo mueven con billeteras digitales”.
“Estamos trabajando para que las billeteras bloqueen este tipo de movimiento porque obviamente hay menores moviendo dinero. Queremos que directamente el menor no juegue, porque está prohibido por razones legales y porque se accede por biometría a la plataforma. Legalmente, con solo apretar un botón, no puede jugar cualquier persona sin modificar datos. Buscamos que el Banco Central nos ayude con las billeteras virtuales para que bloqueen los movimientos de éstas cuentas”.
“El 70% en general juega de manera ilegal. Hablamos de adolescentes y no adolescentes pero hay adultos que también lo hacen. De allí sale un dato que, por ejemplo, el 50% llega a las plataformas ilegales a través de un amigo o conocido”, resaltó Ibarra.