En una fría jornada y calles desiertas, el operativo avanza por todos los barrios de Caleta  

En la ciudad de Gorosito el Censo Nacional de Población, Viviendas y Hogares se está desarrollando con relativa normalidad y por razones de seguridad, los coordinadores del operativo autorizaron a gran parte de las mujeres afectadas al mismo a esperar que hubiera más claridad diurna para comenzar con la tarea del relevamiento.

Los y las censistas que continúan caminando por todo el ejido urbano de Caleta Olivia en una jornada soleada pero de bajas temperaturas, son aproximadamente 800.

Prácticamente son las únicas personas que pueden visualizarse fácilmente ya que debido al feriado especial, las calles están desiertas de peatones y automovilistas.

CENSO21.JPG

La mayoría tuvieron que retornar constantemente a algunos de los domicilios que se les asignó por manzana ya que muchos ocupantes no madrugaron.

En cada zona existen diferentes dificultades. A modo de ejemplo, en el casco céntrico hay varios edificios donde a veces no se responde por porteros eléctricos, en tanto que en barrios periféricos deambula una gran cantidad de perros que pueden resultar peligros.

En zonas altas, como el barrio 3 de Febrero, los censistas deben realizar un doble esfuerzo físico ya que deben caminar por varias veces por una misma calle de pronunciada pendiente para retornar a un mismo domicilio debido a que a hora temprana no lograron dar con sus moradores.

Quedó también en evidencia que los vecinos y vecinas de sectores urbanos más alejados son los que requieren del censo presencial porque no cuentan con una buena conectividad pero también este medio pudo saber que los que la tenían, ayer tuvieron dificultades al quedar colapsada la página web de la Dirección Nacional de Estadísticas y Censos.

En tanto, se está observando la circulación de numerosos patrulleros para prevenir cualquier tipo de incidentes que puedan afectar el operativo y si bien por ahora no hay denuncias relacionadas al mismo, este medio fue testigo del maltrato que recibió un censista en el barrio 3 de Febrero por parte de un vecino.

El mismo le exigía que se acercara para volcar sus datos personales en planilla ya que dijo ser transportistas y necesitaba retirarse inmediatamente de su casa.

El joven le respondió que no podía hacerlo porque esa vivienda no correspondía al área que le habían asignado, lo que generó una fuerte discusión que por suerte no pasó a mayores.

Fuente:

Notas Relacionadas

Dejá tu comentario

Las Más Leídas del Patagónico