La cuarentena por la pandemia continuará después del plazo que estaba previsto hasta el 12 de abril. A nivel nacional, deberá definirse qué actividades estarán incluidas en la flexibilidad de las próximas medidas.
El deporte permanece atento a ello, y en Comodoro Rivadavia el fútbol oficial está a la orden del día, evaluando las posibilidades para cuando todo vuelva a la normalidad.
Ariel Bordeira, vicepresidente de la Liga de Fútbol, le comentó a El Patagónico cómo está el escenario actualmente y qué es lo que se va planificando. “Si se puede, el miércoles 15 de abril nos vamos a juntar en la Liga para ver qué ideas hay. Si en la primera o segunda quincena de mayo va a ser el pico más alto, como dice el Presidente, olvidate de arrancar en mayo. Después, en junio y julio, estamos en pleno invierno”, advirtió.
En ese sentido, adelantó: “A mí me parece que vamos a tener que planificar algo para el segundo semestre del año, a partir de agosto o septiembre. Es una opinión personal”.
Asimismo, afirmó que hay cuestiones ya sentenciadas. “Lo que ya está claro, por las charlas telefónicas que tenemos, es que el formato que habíamos elegido se cae, porque son 28 fechas y ahora es imposible”, acentuó.
Mientras tanto, Bordeira anticipó que, en principio, se manejan dos opciones: un torneo corto, sin ascensos ni descensos, y uno que arranque en septiembre y se extienda hasta mayo del año próximo.
“Está la opción de arrancar el campeonato en septiembre y terminarlo en abril o mayo del año que viene. Por ejemplo, parar el 20 de diciembre y retomar el 10 de enero hasta mayo. Pero el problema no va a pasar tanto por los jugadores que se van de vacaciones entre diciembre y marzo, sino que en el arbitraje tenemos mucho personal de la Fuerza y se van todos, porque la mayoría no son de acá”, reflexionó.
En cuanto a la segunda posibilidad que aparece, resaltó: “La otra es, para no terminar el año en cero, hacer un campeonato desde septiembre hasta el 20, 22 de diciembre pero sin descensos y sin ascensos, como para que los jugadores se muevan y no se pierda ese espíritu de competencia”.
A todo esto, el vicepresidente de la Liga dejó por sentado que el regreso será muy difícil para los clubes, que desde que se suspendió la actividad no tienen ingresos.
“Antes de que pase todo esto, abrir una cancha costaba 15 mil pesos. Abrirla nomás, con policía, árbitros y poniéndola en condiciones para poder jugar. Hoy, los únicos clubes que se salvan son los que tienen a sus socios con débito automático. Acá son poquitos: Rada Tilly, la CAI y no sé si habrá algún otro más. Esos clubes, medianamente, tienen asegurada una entrada para salvar algunos gastos”, enfatizó.