La selección de Portugal se consagró este domingo por segunda vez en su historia campeona de la UEFA Nations League al vencer por penales 5-3 a España, tras igualar 2-2 en el tiempo regular, mientras que no hubo tantos en el alargue en Munich, Alemania.
De esa manera, Cristiano Ronaldo, que en estas horas se habla de una posible llegada a River Plate, tuvo el tercer festejo con la selección lusa.
El flamante campeón tuvo que correr siempre desde atrás ante los dirigidos por Luis de La Fuente, que afrontaban el encuentro como grandes favoritos al título. Y con ese juego ofensivo que los viene caracterizando en los últimos años, lograron la apertura del marcador a los 20 minutos por intermedio de Martín Zubimendi.
Sin embargo, la reacción no tardó en llegar y fue Nuno Mendes, el que con un fuerte remate bajo anotó el 1-1. El lateral izquierdo del PSG hacía su primera aparición en una noche que iba a terminar erigiéndose como una de las grandes figuras de la final.
En un juego decisivo cargardo de emociones, el espectáculo se había guardado una más antes del descanso. Ya sobre el cierre de la etapa inicial, Pedri habilitó a Mikel Oyarzábal y éste, con un toque suave ante la salida del arquero, anotó el 2-1, que le devolvía la ventaja a los españoles.
En el complemento, cuando se jugaba el primer cuarto de hora, volvió a aparecer Nuno Mendes para armar una gran jugada sobre la banda y enviar luego un centro preciso al área para la aparición del interminable Cristiano Ronaldo, que le ganó la posición a Marc Cucurella y empujó a la red para el 2-2 que ya no iba a modificarse.
En la prórroga, el resultado no varió. Sin CR7, que se retiró lesionado, y sin Lamine Yamal, quien no tuvo un buen partido, los dos contaron con sus oportunidades, pero no tuvieron la contundencia necesaria como para evitar la definición desde los doce pasos.
En una tanda con penales muy bien ejecutados, Diogo Costa terminó siendo determinante cuando le atajó el remate a Alvaro Morata y le dio la chance a Ruben Neves de bajarle la persiana al juego y decretar la consagración de Portugal, que levantó por segunda vez en su historia la UEFA Nations League.