Los países de Medio Oriente esperaban el estreno de Barbie el próximo 31 de agosto, pero las autoridades de El Líbano y Kuwait ordenaron prohibir la proyección por considerar que va en contra de los "valores morales".
El ministro libanés de Cultura, Mohamed Murtada, informó a la prensa internacional que la película "promueve la homosexualidad y el transgenerismo, y fomenta la fea idea de rechazar la custodia del padre, menospreciando el papel de la madre y ridiculizándolo. Cuestionando la necesidad del matrimonio y de formar una familia".
Además, el ministro dijo que su proyección tendría "los peores efectos y consecuencias, especialmente en los niños", al tiempo que insistió en que su contenido no va en línea con los valores de la sociedad local, sobre todo en lo respectivo a la familia.
Por su parte, el presidente del comité de censura cinematográfica de Kuwait, Lafi Al-Subaie, citado por el noticiero estatal kuwaití KUNA este miércoles, también acusó a "Barbie" de "portar ideas que fomentan un comportamiento inaceptable y un mensaje que distorsiona los valores predominantes de la sociedad".
Las películas que tienen que ver con el sexo, la homosexualidad o que contienen temas religiosos se cortan de forma rutinaria en Oriente Medio para cumplir con las normas de censura. Si un estudio no está dispuesto a hacer los ajustes sugeridos por los censores, las películas tienen prohibido proyectarse en los cines.