El padre del principal acusado declaró que su hijo le confesó el crimen

Carlos Rubén Chiminelli (69) fue indagado por la fiscal Ana Laura Brizuela, al igual que su esposa Liliana Esther Sánchez (64). Ambos se despegaron del ataque a María Alejandra Abbondanza. Agustín Chiminelli, en tanto, se negó a declarar.

“Cuando vimos que había tanta Policía, él nos contó lo que había hecho y nos dijo que hizo todo solo”. Palabras más o menos eso fue lo que declaró durante la indagatoria Carlos Rubén Chiminelli (69) a la fiscal que investiga el femicidio de María Alejandra Abbondanza (38), ocurrido en Campana. El hombre está acusado, igual que su hijo, Agustín Leonel Chiminelli (24), y su esposa, Liliana Esther Sánchez (64), del delito de “femicidio”. La pareja se despegó del asesinato. Su hijo, en tanto, se negó a declarar.

Según pudo reconstruir Infobae, esta mañana Sánchez y Chiminelli padre se sentaron frente a Ana Laura Brizuela, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción N°2 de Campana y contaron lo que vivieron entre la tarde del viernes y el sábado pasado en la casa de la calle Alberdi, donde fueron encontrados los restos de María Alejandra: el cuerpo estaba parcialmente quemado.

La primera en declarar fue la madre del principal acusado del femicidio. “No tengo nada que ver. Yo no sé nada”, dijo. Sin embargo, la mujer de 64 años, empleada de una farmacia, reconoció que su hijo tenía comportamientos violentos.

El dato refuerza lo que consta en una denuncia fechada el 10 de septiembre pasado, día en que una ex pareja de Chiminelli hijo lo denunció en el Juzgado de Familia de Campana por violencia de género. Incluso, por ello se le ordenó una restricción de acercamiento que, casualmente, fue notificada horas antes de que desapareciera Abbondanza.

“ME DIJO QUE LO HIZO TODO SOLO”

A la declaración de Sánchez, le siguió la de su esposo. El hombre de 69, jubilado y con un impedimento físico que lo limita para moverse, aseguró que recién se enteró de lo ocurrido el sábado, cuando ante la presencia policial, su hijo le confesó el crimen. “Me dijo que lo hizo todo solo”, lanzó.

Fuentes con acceso al expediente confiaron a este medio que, al momento de prestar declaración, ambos, padre y madre del principal sospechoso, se mostraron visiblemente “afectados por la situación”.

“La investigación todavía está en un estadio bastante prematuro, eso dificulta determinar exactamente cuál fue el rol de cada uno. Son distintas las consecuencias si les imputamos (a los tres) el hecho o el encubrimiento, que en el caso de los padres no es punible. Hoy están los tres imputados”, dijo a la agencia de noticias Télam una fuente del caso.

Vale destacar que la presunta participación de los padres en el crimen resulta clave para el desenlace judicial en la causa. En caso de que sólo hayan intentado encubrir a su hijo, no les cabría ninguna pena ya que el encubrimiento por parte de padres de un criminal es una figura no punible para la ley argentina.

Por lo pronto, luego de que Chiminelli hijo fuera indagado por la fiscal este jueves a la tarde y se negara a declarar, la funcionaria judicial les imputó a los tres el delito de “femicidio”.

Lo cierto es que mientras los padres de Chiminelli declaraban, se conoció un video tomado por las cámaras de seguridad de una casa, ubicada a unos pocos metros de donde el sospechoso vive con su familia, que complica la situación del joven de 24 años.

En las imágenes, registradas a las 23.35 del viernes pasado, se ve cómo el presunto femicida camina con dos bolsas blancas en sus manos y las descarta.

Para los investigadores, esta prueba puede ser determinante, ya que el mismo sábado en que fue hallado el cuerpo de Abbondanza en el domicilio de los Chiminelli, se encontró una bolsa con una mancuerna y una toalla ensangrentadas dentro de un tacho de basura de esa cuadra. Además, se hallaron en un terreno baldío, ubicado a 150 metros de la casa de “Chimi”, varias prendas de vestir de Abbondanza, también ensangrentadas.

Fuente:

Notas Relacionadas

Dejá tu comentario

Las Más Leídas del Patagónico