Tres de los asesinatos de este año habrían sido por disputas familiares

Durante este año, en un lapso de poco más de cinco meses, se registraron siete homicidios en Comodoro Rivadavia. Cuatro de ellos siguen sin esclarecerse. A la vez, en los casos de las muertes de Kevin Nieves, Marcelo Jara y Héctor Maldonado, las investigaciones judiciales apuntan a que los presuntos autores se encontrarían en sus propios círculos familiares. En un cuarto caso, el crimen de Matías Paillamán, su familia sospecha de quien fue su pareja.

Comodoro Rivadavia registra siete asesinatos en lo que va del año y cuatro de ellos siguen sin tener sospechosos imputados. Al mismo tiempo, tres de los homicidios se habrían producido en los propios entornos familiares, como consecuencia de antiguas disputas o súbitas peleas que concluyeron con un fatal desenlace.

CASO POR CASO

Luis Miguel Cabrera era un albañil, de 25 años, oriundo de la provincia de Chaco y alquilaba un departamento en un inquilinato del barrio José Fuchs. Su cuerpo fue encontrado durante la mañana del domingo 30 de enero en un zanjón que funciona como basural clandestino, en el final del barrio Laprida.

La autopsia confirmó que se trató de un asesinato por las heridas que tenía y en especial por un corte en la zona de la cabeza. Cabrera fue visto por última vez en la noche del miércoles 26 de enero, cuando descendió de una Ford Ranger de color blanco en una vivienda del barrio Abásolo.

Mediante el seguimiento de cámaras de seguridad, personal policial de investigaciones supo que Cabrera subió a esa camioneta afuera del inquilinato donde vivía. También quedó registrado en otras cámaras cuando bajó en una de las tres viviendas luego allanadas por los investigadores policiales. Levantaron rastros de sangre en uno de los domicilios y en la camioneta mencionada.

Este es uno de los casos que todavía no tiene imputados bajo sospecha.

Mientras tanto, en la tarde del miércoles 9 de marzo, Kevin Nieves (17) fue ejecutado de un tiro por la espalda cuando circulaba como acompañante en una moto, en la zona de la feria La Saladita, en el barrio Quirno Costa.

El adolescente fue interceptado por el conductor de un Chevrolet Corsa de color rojo, quien disparó y huyó.

Los investigadores establecieron que en el vehículo se trasladaba un tío de la víctima. Se realizaron seis allanamientos y el auto nunca fue encontrado. El crimen respondería a una venganza por disputa familiares, pero tampoco tiene procesados judiciales hasta el momento.

El tercer homicidio de este año fue descubierto en la mañana del lunes 28 de marzo en la playa del barrio Stella Maris. El cuerpo de David Orlando Guerrero (42) fue encontrado con cortes en el rostro, torso y con un trozo de botella clavada en el cuello.

Los investigadores sospechan que hubo una pelea y que “El Zurdo” murió en la playa, a solo 50 metros de su casa. Hasta el momento nadie sabe con quién estuvo Guerrero esa la noche del domingo 27 y durante madrugada del siguiente día.

Una pelea entre vecinos del barrio Ceferino, en tanto, derivó en el asesinato de Luis Alberto Ruiz (65). Durante la tarde del martes 26 de abril fue apuñalado en el pecho afuera de su casa, en la avenida Rivadavia al 3500. Caminó malherido una cuadra hasta caer sin vida en la avenida Estados Unidos al 1500. El presunto autor Paulo Oyarzo (40) fue identificado por dos cámaras de seguridad, y cumple prisión preventiva.

Junto al de Kevin Nieves, otro caso que se enmarcaría en disputas familiares se registró durante la noche del jueves 5 de mayo en una casa de la calle Los Plátanos al 4500, en el barrio Abásolo. Marcelo Jara (48) murió tras recibir una puñalada en la pierna derecha. Habría ocurrido durante una pelea con su yerno Pablo Loesa. Este fue imputado por el crimen y permanece en libertad, aunque con prohibición de acercamiento a los testigos.

El sexto homicidio de este año se produjo en la tarde del miércoles 22 de junio cuando la víctima llegó malherida hasta la guardia de la Seccional Séptima. Se trata de Matías Paillamán, quien fue lesionado en el intercostal izquierdo.

El ataque se habría producido en la casa que alquilaba junto a su pareja en la calle Huergo al 4500 frente a la comisaría. Murió durante la mañana siguiente cuando se hallaba internado en el Hospital Regional y su madre sospecha de su pareja. En la casa encontraron manchas de sangre y todavía se investiga la autoría del homicidio.

Y el más reciente asesinato fue el de Héctor Eduardo Maldonado (33), ocurrido durante la noche del último miércoles. La víctima llegó malherida a pedir ayuda hasta un supermercado de la calle Estados Unidos y fue trasladada al Hospital Regional donde se constató su fallecimiento por una lesión con arma blanca. En la causa está imputado un hijastro adolescente de la víctima quien desde el viernes cumple arresto domiciliario.

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