“La intención era mostrar en cada copa un paisaje, en este caso de Cuyo, de donde se produce el vino”, dijo a Télam el enólogo Gabriel Vivanco, a cargo del taller con el que se buscó promocionar la calidad y la inclusión de esta variedad en la gastronomía regional.
Vivanco precisó que la intención es que “con esa misma impronta se pueda trabajar en la Quebrada de Humahuaca con apicultores y floricultores, generando valor real y genuino en origen para fomentar su desarrollo”.
El taller permitió conocer en detalle la calidad del vino Blumbey y la bodega Kelevi, indicó Vivanco, quien es su propietario.
La propuesta, dentro del programa de “Fortalecimiento y Desarrollo de la Gastronomía Turística de Jujuy” de la Secretaría de Turismo provincial, se propuso buscar “no sólo promocionar el producto sino mostrar que es posible su desarrollo y lo vamos a proyectar a Jujuy”, detalló Vivanco.
El enólogo señaló que se trabaja con flores que son nativas, como aguaribay, retamo, jarilla, piquillín y algarrobo.
“La región Noroeste tiene algunas flores que son diferentes a las de Cuyo, lo que le da una impronta total de lo que es un paisaje como la quebrada de Humahuaca”, señaló.
Vivanco, quien participó hace unos días de la Fiesta de la Flor en Maimará, en Jujuy, sostuvo que “el turista valora mucho la gastronomía y en esa área se utilizan mucho las flores en los platos regionales”.
La directora provincial de Desarrollo de Productos de la Secretaría de Turismo de Jujuy, Sandra Nazar, destacó el “potencial gastronómico” de la provincia y afirmó que “es un aspecto fundamental de un destino turístico”.
La capacitación y promoción del vino Blumbey se suma a la propuesta recientemente lanzada de “Jujuy la carta”, circuito gastronómico-musical en San Salvador, dijo Nazar.