Alejandra 'China' Zamora saldrá a escena como número principal en el municipal 1

Tras derrotar, el sábado 26 de agosto, a Elizabeth Britos por puntos, la promesa femenina del pugilismo se prepara para volver a medirse con Makarena "la diosa" Gallastegui de Buenos Aires.
De excusas no conoce Alejandra la "China" Zamora (5: 1P-1 KO), porque incluso cuando le llegó la maternidad –y aumentó más de 20 kilos- ni siquiera dudó en que volvería a subirse a un cuadrilátero.
Con la llegada de Mía, Alejandra inició la puesta a punto con su papá (no le sale decirle entrenador) Robinson Zamora. Detrás de él, y junto con un equipo metodológico del Ente Comodoro Deportes, con Martín Gurisich como referente, la "China" volvió a bailar entre las cuerdas.
Su última presentación fue el sábado 26 de agosto en el Microestadio Municipal de Hurlingham (Buenos Aires), donde se consagró por puntos. En tanto que su pareja, Héctor "Tigre" Saldivia no tuvo resultado favorable al ser descalificado ante Ricardo "El Bebo" Villalba.
"Lo que cada boxeador desea es continuidad en su carrera. Y por suerte para nosotros se nos dio, porque mi papá habló con el 'Vasco' (Vicente Arisnabarreta) y surgió esta chance para ir de fondo. Es una velada que promete un buen espectáculo con el resto de la cartelera", anticipó Zamora a El Patagónico.
En lo que respecta al desafío que se aproxima, Alejandra sostiene que el hecho de ya venir de un combate y tener en la proximidad otro compromiso, libera cargas en la preparación, dado que se trata de acondicionar el cuerpo para comenzar a "soltarse" arriba del ring. Junto con sesiones de guanteo como complemento.
"Se trata de mantener el ritmo. Correr y mantener algunas sesiones de guanteo que comenzamos la semana pasada. Como para estar activos y esperar la pelea de este viernes", comentó.
Para Alejandra Zamora, será la primera vez que irá de protagonista en pelea de fondo ante Makarena "la diosa" Gallastegui de Buenos Aires, que viene con un récord de 6 peleas, 4 ganadas y 1 KO.
"El combate de este viernes por la noche es una buena prueba para nosotros y para seguir consolidándome como profesional. La idea es poder salir al cuadrilátero y mostrar para lo que estamos preparados", adelantó.

SIN EXCUSAS

Alejandra sostiene que la pelea más larga que tuvo que dar, fue cuando le tocó recibir a Mía, quien llegó para completar la familia tras doce horas de parto.
Así y todo, la boxeadora forjada en el municipal 1 no dejó de seguir su amor por los guantes, mientras estrenaba el título de maternidad.
"Yo cuando me embaracé subí más de 20 kilos, porque me comía todo y engordé en consecuencia. Pero tras tantas horas de parto y ser mamá. En mi caso me hizo más fuerte, ya sea tanto en lo físico como en lo mental. Porque me plantee volver a recuperar mí peso y volver a combatir. En mi caso la maternidad no fue una excusa, no debería serlo para ninguna mujer, salvo que haya tenido un problema de salud durante la gestación y el parto", sentenció.
Comiendo menos y retornando al gimnasio municipal 1. Alejandra fue recuperando su figura como deportista y combatirá en la categoría súper pluma (hasta 59 kg).
"Atrás de una no solo está mi papá, sino todo un equipo dirigido por Martín Gurisich y Flavio Benítez, que nos exigen muchísimo tanto en resistencia como en velocidad. En nuestro caso asociado al boxeo. Y también está muy bueno que las mujeres se empiecen a animar y se acercan al gimnasio. De hecho, en el último turno de las 20:30, a veces se superan las 60 personas y eso hace chico el lugar. Pero por otro lado habla de lo bueno de que las chicas vayan recuperando su protagonismo. No solo por boxear, sino por sentirse mucho mejor consigo misma. En cuanto a dietas, no se trata de adherir a alguna en particular, sino aprender a comer sano y en forma moderada. Luego el resto viene solo", sentenció.

Fuente:

Notas Relacionadas

Dejá tu comentario

Las Más Leídas del Patagónico