La audiencia fue presidida por el juez de Ejecución Penal, Miguel Ángel Caviglia y al imputado lo asistió Mauro Di Taranto, de la Defensa Pública, mientras que por el Ministerio Fiscal asistió el funcionario Ariel Corredera.
Hay que recordar que Llantén y su hermano Axel fueron condenados en octubre del año pasado por el homicidio del Diego Soto (29). Fue durante un juicio abreviado. El primero se adjudicó la autoría y declaró que su hermano lo defendió porque pensó que la víctima tenía el cuchillo. En esa ocasión lo condenaron a 8 años de prisión. Axel, en tanto, recibió una pena de 3 años en suspenso por exceso en la legítima defensa.
El hecho tuvo lugar el 25 de diciembre de 2016 y la víctima fue Diego Gustavo Soto, a quien se lo conocía por su actividad de limpia vidrios en los distintos semáforos de la ciudad.
A las 8:50 de ese domingo, sobre la esquina de 13 de Diciembre y Ameghino, frente a la sede de la Confederación General del Trabajo (CGT) se inició la pelea. En el fondo del patio de una vivienda de la calle 13 de Diciembre a cuyos propietarios conocía la víctima, se desarrolló la pelea que concluyó con Soto herido de cinco puñaladas, una de las cuales le penetró la vena aorta y le provocó la muerte en contados minutos.
En medio del ataque, el dueño de la casa observó a los agresores y les golpeó la ventana, logrando así que cesaran su agresión.
A todo esto un oficial de policía que arribaba con su automóvil a su vivienda ubicada en el sector de La Loma observó cuando las tres personas discutían. Minutos después el efectivo -que se convirtió en el testigo clave del homicidio- observó a los dos hombres que luego serían detenidos, con remeras de color blanco manchadas de sangre.