Menos de veinte personas, entre jubilados y titulares de pensiones no contributivas cuyos DNI terminan en 4 y 5 concurrieron hoy a la sucursal Caleta Olivia de Banco Santa Cruz para percibir sus haberes conforme a la resolución del Banco Central para evitar aglomeraciones preventivas al Coronavirus.
También se acercaron otras personas con la intención de formular otras consultas que en su mayoría fueron evacuadas por efectivos de la Policía de Santa Cruz que estaban apostados en el acceso, acorde a los conocimientos básicos que tenían sobre trámites bancarios.
Pero un periodista de El Patagónico fue testigo de un insólito caso que se produjo cuando una abuela jubilada pidió hablar con algún empleado para decirle que un familiar directo necesitaba saber cómo tenía que hacer para volver a contar con la tarjeta de débito que había extraviado.
El policía de guardia llamó al único empleado que estaba en el desierto hall y éste le dijo a la mujer adulta mayor el tramite requerido debían realizarse a través de una página de internet del banco, pero no le dio mayores precisiones.
Al notar que la mujer quedó desorientada, el periodista de este medio le pidió al policía que volviera a contactar al empleado para que le facilitara pequeñas tarjetas donde figuran recomendaciones para reestablecer por cajeros automáticos el PIN olvidado de tarjetas de débito y otras referidas a la manera en que deben renovarse las extraviadas mediante la web de la institución, algo que figura al final de esas recomendaciones..
Minutos después, el empleado recibió el material requerido y el policía se lo facilitó a abuela quien se le agradeció una gentileza que bien tendría que haber sido cumplida por el empleado ya que ese mecanismo de consultas había sido habitual tanto en el sábado como el domingo en la misma institución.