Al despertar los comodorenses pudieron disfrutar de la belleza de los cerros vestidos de nieve. A pesar de que el Chenque se encuentra a poca distancia del mar también se cubrió de blanco. En todos los alrededores la nieve puso su adorno en matorrales silvestres, árboles, vehículos y hasta techos de casas.
Ante el paisaje de invierno muchas familias salieron por la tarde a pasear hacia los lugares donde se registró mayor acumulación de nieve, como los alrededores de Bella Vista Sur, Cordón Forestal y Diadema Argentina. Así, el Parque Eólico de Kilómetro 27 fue uno de los paseos donde en especial los niños disfrutaron y palparon con sus manos esa magia de la naturaleza.
Tampoco faltaron los tradicionales muñecos de nieve adornados y las guerras de bombitas de hielo.
La sonrisa y la felicidad de los chicos se anticipó al festejo del Día del Niño con la sola presencia del particular fenómeno climátcuo.
En la zona central del ejido, mientras tanto, sólo se registró caída de agua nieve.