La fiscal Cecilia Codina, quien se encuentra al frente de la investigación del homicidio de Claudio Omar Boz (45), asesinado a golpes en la cabeza y luego calcinado en una playa cercana a Rocas Coloradas, presentó ayer la formalización de la investigación e imputó al único sospechoso que hasta ahora fue detenido.
Sin embargo, la acusadora pública cuenta con testimonios que conducen a que el propietario de la chacra donde residió la víctima en los últimos tres meses sería el autor material del asesinato. Se trata de Emilio Taher Abud, alias "el Turco", quien un día después del hallazgo del cuerpo abandonó Comodoro Rivadavia, dejando más sospechas sobre su presunta participación en el caso.
La audiencia de control de detención de Medina y apertura de la investigación preparatoria por el asesinato de Boz se desarrolló ayer por la mañana en la Oficina Judicial de Comodoro Rivadavia. El imputado recibió la asistencia de las defensoras públicas Cristina Sadino y María de los Angeles Garro.
La fiscal Codina, junto a la funcionaria Verona Dagotto, relató que el homicidio se produjo el jueves 15 de setiembre cuando Taher Abud le propinó varios golpes en la cabeza a la víctima, causándole traumatismo de cráneo. Luego habría trasladado el cadáver hasta la playa denominada "El Enganche II" para prenderle fuego.
Todavía se desconoce el lugar donde fue atacado Boz debido a que en el interior de la finca del empleador de la víctima no se hallaron rastros de que se hubiera producido una pelea.
Las representantes fiscales agregaron que entre las 17 del jueves 15 de setiembre y las 18 del martes 20, Medina ayudó a Taher Abud a fugarse de esta ciudad, quedando a cargo de sus dos propiedades y de su automóvil.
Detallaron que tanto Medina como la víctima trabajaban para "el Turco" Abud en la cría de aves de corral y conejos. Por esa razón, las acusadoras calificaron la participación de Medina como de "encubrimiento" del homicidio de Boz.
SOSPECHOSO PROFUGO
Luego, la fiscal Codina solicitó que se declarara legal la detención de Medina porque se produjo en el marco de los allanamientos y el secuestro del Renault 9 de su empleador y cinco teléfonos celulares. El automóvil presentaría manchas de sangre en su parte trasera, acotó la fiscal.
Además, detalló que existe un testigo de identidad reservada que señala problemas entre Taher Abud y la víctima. Asimismo, requirió la libertad del imputado con medidas sustitutivas a partir de la existencia de elementos de convicción suficientes para tenerlo como autor del delito de encubrimiento.
Pidió la prohibición de Medina para salir de esta ciudad sin autorización judicial y presentaciones semanales en la Oficina Judicial. Enumeró en su argumento la existencia del peligro de fuga, la gravedad del ilícito y la expectativa de pena que podría ser de cumplimiento efectivo. Por último, la fiscal mencionó el peligro de entorpecimiento y que se le impida todo tipo de contacto con testigos y con Taher Abud.
Las defensoras no cuestionaron la legalidad de la detención, pero agregaron que no existe peligro de fuga ni de entorpecimiento ya que en estos días que pasaron Medina no se acercó a testigos ni ocultó pruebas. Así, exigieron su libertad sin medidas sustitutivas.
El magistrado resolvió declarar legal la detención de Medina y formalizar la causa en los términos que planteó la Fiscalía. Dictó la libertad del imputado con medidas sustitutivas. Además, decretó las prohibiciones propuestas por la parte acusadora. Por último otorgó el plazo de seis meses para concluir con la investigación.
- 23 septiembre 2016