Pericia documentológica: la ciencia del pequeño detalle

La documentología es el estudio y análisis técnico científico del grafismo y del soporte que busca establecer autenticidad, falsedad o individualizar a su autor. Marcos Ghiberto, perito documentólogico del equipo interdisciplinario de la Procuración Fiscal de Comodoro Rivadavia, sostiene que "el acto escritural es netamente subconsciente" y el análisis debe ser minucioso. En uno de sus trabajos determinó que la caligrafía de Miguel Pallalaf, homicida y violador de Yasmin Chacoma, correspondía a una nota que decía: "Hija anda con el ceñor señor te ba dar una Plata y me la traes" (sic). El depravado, condenado a prisión perpetua, la había escrito con el fin de engañar a la niña. El perito ha descifrado falsificación de cheques por montos millonarios en estafas al Banco Chubut y Banco Nación.
La documentología es una ciencia apasionante. Se encarga del estudio de un documento, público o privado, a través del análisis del soporte, la caligrafía de leyendas, firmas o guarismos en los que se busca determinar autenticidad, falsedad o autoría.
"Es un trabajo detallado, y muy minucioso. Es un trabajo de hormiga", define Marcos Ghiberto, el perito documentólogo de la Procuración Fiscal de Comodoro Rivadavia. El especialista trabaja desde 2009 en pericias documentológicas y además ha desarrollado 600 pericias accidentológicas en esta ciudad.
La corriente a la que pertenece Ghiberto, egresado de la Universidad del Nordeste es la de la grafo-crítica y tiene como cabecera al autor Félix Val Latierro. Deja en claro que estudia la correspondencia del grafismo y no la personalidad del que escribe, cuya función cumplen los grafólogos. El coteja grafías, escrituras y confiesa que son las letras cursivas las que ofrecen más elementos de análisis que las de imprentas.
Una de las pericias más importantes que ha realizado Ghiberto en lo penal criminal fue la comparación caligráfica de una nota hallada por los investigadores en los pasillos del barrio 30 de Octubre por donde habría pasado Yasmin Chacoma junto al hombre que la terminó violando y asesinando aquel fatídico 2 de setiembre del 2013.
La pericia documentológica permitió así comprobar que la nota había sido escrita de puño y letra por Miguel Angel Pallalaf, condenado a prisión perpetua luego de que la Fiscalía le comprobara su participación en el macabro crimen y ultraje de la niña, uno de los crímenes más graves de la última década.
Los peritos del Laboratorio Regional de Investigación Forense (LIF) hallaron muestras de ADN en una bolsa, el lazo con el cual estrangularon a la niña y el semen que quedó en el cuerpo de la víctima, y lo compararon con los perfiles genéticos del registro de abusadores sexuales de la provincia y se estableció en un 99,9 por ciento que pertenecía a Pallalaf.
En 2006 el violador había sido condenado a 9 años de prisión por un caso de abuso sexual en Trelew y al momento del crimen de Yasmin quebrantó el régimen de salidas transitorias del cual gozaba.
El 4 de febrero de 2014, Pallalaf fue detenido por personal policial, durante un operativo de control rutinario en la ciudad de Puerto Madryn, donde dio una identidad falsa. Desde allí fue trasladado a Comodoro Rivadavia para comparecer ante la Justicia.
Una vez detenido Pallalaf no quiso escribir en un papel cuando la Fiscalía se lo requirió. Se buscaba cotejar aquella escritura que hiciese, con el material dudoso que se había encontrado. Pero al no querer colaborar Pallalaf, los funcionarios de la fiscal Liliana Ferrari, junto al perito Cristian Ansaldo, se las ingeniaron para conseguirle a Ghiberto notas que escribía Pallalaf en la alcaidía policial de Trelew en busca de permisos. También le acercaron al perito una muestra de un cuaderno para poder compararla. Todas muestras indubitadas, es decir, auténticas.
"La pericia de Pallalaf fue una pericia que a mí al menos me ha dejado satisfecho independientemente que al momento de la sentencia no fue considerada. Toda persona que estudia mi disciplina tiene en el alma, tratar de descubrir la mecánica de producción del hecho, intentar desentrañar, ponernos en el lugar de una persona que puede producir esto", confiesa Ghiberto.
Es que una de las incógnitas que tenía el perito al ver el video en el que se veía a la niña acompañar a un hombre, era que "no comprendíamos cuál era el ardid que había utilizado esta persona para que la nena camine voluntariamente junto a él. A partir de muchas hipótesis, de un engaño, de la promesa de algún dinero, o de que era una persona muy conocida, cuando aparece la nota se trabajó con eso".
Ghiberto cuenta que se descartó rápido que la nota no era de la madre -el ardid de la nota buscaba hacer creer que sí- porque las grafías de la mujer eran incotejables ya que eran muy disímiles.
Sí se comprobó finalmente que el papel correspondía a un cuaderno del refugio de Mirella en el que se encontraba Pallalaf. La nota decía "Hija anda con el ceñor señor te ba dar una Plata y me la traes" (sic).
El análisis comparativo, que se realizó en la detección del gesto gráfico del que la escribió -que son de carácter repetitivo en una persona en el acto escritural-, le permitió al especialista asegurar que el patrimonio gráfico era de Pallalaf.
"El gesto gráfico de Pallalaf era muy marcado, ejecutaba ciertas letras de la misma forma. Cuando uno ve que la letra 'p' inicia con un arpón abajo, asciende en 45 grados y termina lacerada a la derecha, cuando una persona tiene ese gesto gráfico, es subconsciente", explica Ghiberto.
El fiscal Martín Cárcamo sostiene que la pericia fue muy importante porque sumó un indicio más de que Pallalaf había participado en el crimen.
"El acto escritural es netamente subconsciente", dice el perito. No entiende cómo hay algunos que cuestionan la cientificidad de la documentología. El escribir es un acto absolutamente psíquico. "La psiquis, y el grafismo, están en una relación permanente de causa y efecto", cita a Val Latierro. Por eso sostiene que la firma es muy difícil cambiarla.
MICROCIRUGIA
DE CHEQUES
Los peritos documentólogos son necesarios para detectar estafas con papel moneda nacional o incluso cheques apócrifos o con firmas falsas. Tienen distintos mecanismos para analizar y cotejar, además de la tinta que se utilizó para escribir: sea una pastosa de un bolígrafo o una fluida de una pluma o lapicero. Pueden determinar la edad relativa o absoluta de un documento. Pueden comparar a través de la cromatografía, y con "sacabocados" fragmentos de un trazo previo autorización del juez y así separar pigmentos y colorantes de la tinta, en un soporte acuoso o aceitoso. Ese resultado los ubicará en el tiempo en el que ese componente fue ingresado al mercado.
El caballito de batalla de cualquier documentólogo más que la lupa, es la luz ultravioleta. Con ella pueden determinar si los papeles son verdaderos o falsos.
Aunque los estafadores a lo largo del tiempo han logrado igualar algunas medidas de seguridad, y burlarlas, Ghiberto sostiene que el hilo de seguridad que va entramado en el papel de un billete nunca podrá ser igualado.
"Yo tuve a la vista una estafa de cheque del Banco Nación, de un artesano que había hecho cheques con lápiz Rotring, un dibujante, que pese a tener todas las medidas de seguridad modificó el número de serie con un grafito, un portaminas", recuerda. La persona fue detenida. El dibujante había tardado un año en modificar cuatro cheques. La suma era millonaria.
"Hay que tener mucha paciencia. En Comodoro he tenido casos de microcirugías de cheques. El proceso que se hace con un cheque es un análisis del estado de recepción, si tiene tachado, pliego, dobles. Cuando el cheque no tiene nada se lo somete a la luz ultravioleta", explica.
Hay gente que adultera cheques de manera física o química. Lo hacen a través del borrado, que si luego se analiza microscópicamente se observan las fibras celulósicas erizadas del papel. Los grabados químicos, en los que se utilizan solventes, alcohol o hipoclorito, para borrar y volver a escribir, son otra modalidad de estafa. "Por más que sea muy prolija la maniobra, la tinta fugitiva que tiene el cheque, la tinta que fluorece generalmente difunde, se ensancha, y al ultravioleta surge", dice Ghiberto.
"En Comodoro hemos tenido casos muy complejos en donde no fue modificado, ni por medios de borrado, ni químicos" resalta el perito.
En esos casos estaba convencido de que algo raro tenía, y apelando a un curso de capacitación en Brasil de microcirugía de cheques, realizó la prueba del enrollado. Al plegarlo se vieron cómo saltaban los números. "Son falsificadores con precisión increíble, en los que utilizan bisturíes para colocar en un cheque apócrifo, los números de un cheque que quieren falsear. Van cortando los números de series del original y lo van pegando" sostiene Ghiberto (ver figura 3).
También logró descubrir las firmas falsas de cheques del Banco Chubut con un monto mayor de dos millones de pesos.
Marcos lee sobre criminalística. Cuando puede actualiza su biblioteca. Mira programas de televisión como "Mentes Criminales", y la vieja versión de CSI. Sabe que la investigación no es igual a la ficción estadounidense o inglesa. En la realidad se invade la cadena de custodia, y no se puede levantar nada de la escena sin un testigo presente. Busca contactos internacionales y en su red social interactúa con eminencias como el perito balístico Cibrián Vidrio. De niño jugó al fútbol en Libertad de Sunchales y hace dos años que estudia percusión.
Advierte que en Comodoro Rivadavia hay una gran cantidad de carnets apócrifos, cédulas verdes, títulos, formularios 12 y 08 falsos con papel soporte original.
Con ya 600 pericias accidentólogicas realizadas, también se convierte en un referente de esa materia. Aunque no le gusta la exposición, Letra Roja insiste para dar a conocer la tarea de este tipo de peritos que trabajan muchas veces en el anonimato.
Entre otras responsabilidades, peritó el accidente de tránsito donde se produjo la muerte del profesor de educación física Alberto "Tito" Blanco, ocurrido 18 de mayo de 2010 en el barrio Industrial cuando su automóvil fue arrollado por un camión. Allí pese a que el video fue fundamental, cronometró e hizo una edición de ese material audiovisual fotograma por fotograma para determinar la responsabilidad del camionero que fue condenado por homicidio culposo.
Hoy trabaja con el programa "FX advanced", un software de animación de accidentes, de origen canadiense, que ha sido adquirido por la Procuración.
Ghiberto entiende sobre leyes de rozamiento, comportamiento de los distintas tipos de carrocerías, mecánica, formas y modos de accidentes. En su escritorio hay miles de fotos de choques y distintos croquis de sentidos de circulación de vehículos. El pequeño detalle no puede escapársele. Es ese detalle el que confirmará una hipótesis o la descartará.

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