Un hombre que quiso hacer justicia por mano propia por el supuesto robo de un auto deberá cumplir un castigo de tres años y medio de cárcel.
En una audiencia de determinación de la pena realizada este miércoles en la Ciudad Judicial, la fiscal del caso Lucrecia Sola y la asistente letrada Agustina Bouyer, pidieron que se le impongan 6 años de prisión a José Ignacio Sepúlveda quien reconoció haber irrumpido en la casa de una persona, agredirla a golpes y, bajo amenazas, llevarla a la meseta y abandonarla.
Además, la fiscal del caso y la asistente letrada requirieron que, debido a que Sepúlveda tiene antecedentes penales computables, se declare su primera reincidencia.
Agravantes y atenuantes
Para arribar a la pena solicitada las representantes del Ministerio Público Fiscal valoraron como agravantes: que los hechos fueron cometidos por varias personas que utilizaron armas de fuego; que hubo extrema violencia física y verbal; que fueron en la casa de la víctima durante la noche y frente a su familia; que fueron hechos organizados y planificados; que realizaron disparos de arma de fuego; que la víctima estaba desarmada; y que el imputado tiene antecedentes penales computables. Como atenuantes, las funcionarias de la fiscalía sólo valoraron el reconocimiento de los hechos por parte de Sepúlveda.
El tribunal colegiado que intervino, conformado por Carina Álvarez, Richard Trincheri y Cristian Piana, no convalidó el pedido de Sola y Bouyer y fijó, por unanimidad, una pena menor: 3 años y 6 meses. El tribunal sí reconoció la reincidencia de Sepúlveda.
La hipótesis del caso por la que se fijó la pena fue que el 7 de mayo de 2024, cerca de las 23:45, Sepúlveda fue hacia la casa de la víctima, ubicada en la zona del barrio Cuenca XV de la ciudad de Neuquén. Junto a otras personas que aún no fueron identificadas, patearon la puerta, se metieron en la vivienda y sacaron armas de fuego. En esas circunstancias, el imputado le recriminó a la víctima el robo de un auto que previamente le había vendido. Después obligó al joven a subir a una camioneta: lo sentaron en el asiento trasero, en el medio, con una persona a cada costado. Le apuntaron con las armas, lo golpearon y lo obligaron a mirar hacia abajo. En la zona de la Autovía Norte, a unos 4 kilómetros de su casa, lo hicieron bajar, lo amenazaron con dispararle si el auto no aparecía y se fueron.
Culpable de privación ilegal de la libertad
Al día siguiente del primer ataque, Sepúlveda fue nuevamente hacia la casa de la víctima, otra vez junto a otras personas que aún no están identificadas, volvieron a atacarla a golpes. El joven logró escapar, corrió para resguardarse, pero mientras lo hacía le dispararon al menos en cinco ocasiones, sin que ningún proyectil lo impactara.
A la hora de definir la causa por el hecho ocurrido en 2024, las partes comunicaron en mayo pasado que se había llegado a un acuerdo. De esta forma, José Sepúlveda fue declarado penalmente responsable por los delitos de privación ilegal de la libertad, agravada por haber sido cometida con violencia y amenazas en concurso real con abuso de arma, ambos en carácter de coautor (artículos 142 inciso primero, 104, 45 y 55 del Código Penal).
LMN