Los gobernadores —y los legisladores que les responden— se convirtieron en los verdaderos árbitros del Congreso: sin su apoyo, ninguna de las iniciativas del Ejecutivo podrá avanzar.
La estrategia del Gobierno es clara: negociar de manera directa, caso por caso, con cada mandatario provincial. A cambio de acompañamiento en Diputados y el Senado, los gobernadores exigen algo concreto: que el Presupuesto 2026 incluya fondos, obras y transferencias clave para sus jurisdicciones. Hasta que eso no aparezca en la “letra chica”, no hay cheques en blanco.
Tras las elecciones del 26 de octubre, La Libertad Avanza fortaleció su presencia en ambas cámaras: 18 senadores y 88 diputados. Sin embargo, no le alcanza para controlar el Congreso. Necesita aliados para abrir sesiones y, sobre todo, para aprobar leyes.
Un relevamiento del politólogo Pablo Salinas revela que 92 diputados y 28 senadores responden directamente a sus gobernadores. Ese es el universo que el Gobierno necesita seducir.
Pero no todos están en la misma sintonía:
• Los gobernadores del peronismo duro —Axel Kicillof, Gildo Insfrán, Ricardo Quintela y Gustavo Melella— ya están fuera del radar. Suman 41 diputados y 7 senadores, votos imposibles para Milei.
• El núcleo más cercano a la Rosada está integrado por Leandro Zdero, Alfredo Cornejo, Jorge Macri, Rogelio Frigerio y Claudio Poggi. Entre los cinco reúnen 11 diputados y 3 senadores.
• El grupo más codiciado es el de los “árbitros”, gobernadores capaces de negociar aun sin afinidad política: Maximiliano Pullaro, Martín Llaryora, Ignacio Torres, Gustavo Valdés, Carlos Sadir y Claudio Vidal. En total, suman 14 diputados y 9 senadores.
• A ellos se agregan Hugo Passalacqua, Rolando Figueroa, Gustavo Sáenz, Marcelo Orrego y Alberto Weretilneck, con otros 10 diputados y 4 senadores.
El peronismo también ofrece matices
La Casa Rosada sabe que no todo el peronismo es igual. Osvaldo Jaldo (Tucumán) ya mostró disposición a negociar en debates previos. Raúl Jalil (Catamarca) acumula señales de acercamiento al Ejecutivo: tiene 4 diputados y 1 senador propios y evalúan formar bloque aparte.
Gerardo Zamora (Santiago del Estero), uno de los jugadores más influyentes del interior, controla a los 3 senadores y 7 diputados de su provincia y no se descarta un acuerdo pragmático.
Votos por presupuesto: la pulseada que se viene
Para Milei, la aprobación del Presupuesto 2026 es la antesala indispensable de las reformas. Para los gobernadores, ese presupuesto es la moneda de cambio: obras, transferencias, fondos para infraestructura, coparticipación y compromisos concretos.
Las negociaciones, aseguran en el Congreso, se harán “gobernador por gobernador”, sin intermediarios partidarios. El día de la votación, advierten, las pantallas no mostrarán bloques políticos: mostrarán provincias divididas entre quienes acompañan y quienes se plantan.
El futuro de las reformas —y del poder real de Milei— se escribirá así, voto a voto, en despachos donde la política federal vuelve a demostrar que, en Argentina, ninguna Casa Rosada gobierna sola.