El crimen de Barbi continúa impune. La perra comunitaria del barrio Mosconi fue salvajemente apuñalada a principio de mes y los investigadores todavía no dan con los responsables de la muerte del animal.
Según fuentes consultadas por El Patagónico, la investigación se basa en un hombre que anteriormente había atentado contra la vida de otro animal de la zona. En aquella oportunidad se pudo rescatar el animal, pero la persona dejó un antecedente en su actuar. La denuncia por ese ataque no fue realizada para evitar problemas entre los vecinos.
Todo parece indicar que se trataría de la misma persona, por lo que los investigadores trabajan en las grabaciones de las cámaras de seguridad de los vecinos para dar con el paradero del autor del crimen de Barbi. “Sin pruebas no podemos actuar, por eso es necesario que todos aporten la más mínima prueba que tengan”, sostuvieron ante la consulta de este diario.
Las autoridades solicitaron a los habitantes del barrio Mosconi que brinden cualquier tipo de dato para que la investigación continúe y el caso no quede impune.
El sábado pasado se realizaron dos actividades en reclamo de justicia por la perra comunitaria de Kilómetro 3. La primera constó en la realización de un mural en frente a las oficinas del Registro Civil, que se encuentra a la vuelta de Federación Deportiva. La actividad fue impulsada por el artista Matías Díaz.
Asimismo, una gran cantidad de vecinos se movilizaron para exigir justicia. La concentración fue en Área Central de Kilómetro 3 para exigir “presencia del Estado, políticas públicas y justicia para perros y gatos”. La marcha se realizó en tranquilidad con carteles, pancartas y fotos.
La movilización no solo sirvió para pedir justicia por Barbi sino para que se cumpla con la ordenanza N°15.776 y la Ley I- N° 655655.