La Seccional Quinta de Policía en once horas detuvo a nueve personas por distintos delitos, entre ellos tres menores de edad que después de ser puestos a disposición de las autoridades judiciales, en calidad de demorados, fueron entregados a sus familiares.
Según informaron las fuentes oficiales, entre las 21:50 del sábado y las 10:30 de ayer hubo cuatro mayores detenidos; dos de ellos a raíz de un choque en Marinero López y José Ortega en donde se solicitó la presencia policial a raíz de un problema entre los conductores.
Según se informó, cuando personal policial se dirigía al lugar, una mujer les advirtió a los uniformados que en un Chevrolet Agile gris viajaba un hombre armado. Al toparse con el vehículo de frente los agentes le cruzaron el patrullero, y en esa maniobra el sospechoso chocó con la unidad policial.
Cuando el acompañante bajó, los policías advirtieron que el conductor realizó un movimiento extraño y procedieron a identificar a los dos ocupantes del rodado, encontrando debajo del asiento del acompañante un revolver calibre 38 y una media con cuatro municiones del mismo calibre.
Los dos hombres fueron trasladados a la comisaría para ser identificados y posteriormente el Ministerio Público Fiscal dispuso que el acompañante quede en libertad. Mientras el conductor, identificado como Carlos Andrés Guerrero (39), quedó a disposición de la Oficina Judicial por el delito de portación ilegal de arma de fuego.
El personal de la Seccional Quinta, en ese procedimiento, no perdonó ni a los testigos de actuación. Es que para realizar las detenciones y el secuestro del arma, dos personas debían presenciar el operativo, pero al identificar a dos jóvenes de nacionalidad paraguaya, no tenían documentos y no supieron argumentar cómo habían ingresado al país. De esa forma, fueron demorados y trasladados a la dependencia de Lisandro de la Torre y Patricios. Allí una vez comprobado que no tenían pedido de captura los dejaron en libertad.
Finalmente, la policía secuestró el Chevrolet Agile, -patente IZX 478- en el que viajaba Guerrero y a la vez solicitó el secuestro de un Volkswagen Senda -dominio UTB 380- que estaba chocado y abandonado en la vía pública.
Es que según los indicios de la policía, el acompañante del detenido había colisionado el Senda contra otro vehículo y habría buscado ayuda para perseguir a quienes lo habían chocado.
ROBO EN AUTO
Dos horas más tarde, la policía de la comisaría Quinta detuvo en Patricios y Rementería a Alan Barrionuevo (18) y Daniel Jesús Ortega (24). Eran las 1:15 y los jóvenes fueron sorprendidos luego de romper el vidrio de un Chevrolet Corsa -patente IJN 189- con presuntas intenciones de robo.
Según se informó, los dos sospechosos rompieron el ventilete de una de las puertas del vehículo y luego intentaron abrir la unidad, pero la policía los detuvo.
Casi de manera simultánea los efectivos de la dependencia, conducida por los comisarios Ariel González y Jorge Calderero, también acudieron a un caso de violencia familiar.
En el edificio 93 una mujer fue golpeada por su expareja, quien la dejó encerrada junto a sus dos hijos menores. La mujer denunció que el hombre la golpeó, le tiró los muebles por la ventana y la dejó encerrada con llave.
Personal policial llegó y ante los gritos desesperados de la víctima rompió la puerta, poniendo en reguardo a la mujer embarazada de cinco meses, como a los niños. El hombre se escapó, pero está identificado.
EL COMISARIO EN EL TECHO
Lo cierto es que la Seccional Quinta tuvo una maratónica madrugada, donde incluso el comisario Jorge Calderero tuvo que actuar.
Acompañado por el oficial Raúl Pérez, el segundo jefe de la dependencia mostró su operatividad en la calle al detener a dos sospechosos. Fue en un intento de robo en una vivienda de Juan Manuel de Rosas al 3.200.
Los oficiales junto a un cabo detuvieron a un joven de 14 años que salió corriendo de una vivienda en construcción en la que había roto una ventana. Calderero al ser advertido de que había otro sospechoso en el interior de la casa, se subió al techo y encontró escondido debajo de un tanque de agua a otro joven de 15 años. Los dos menores fueron trasladados a la comisaría, donde después de ser identificados fueron entregados a sus padres.
Mientras que a las 10:35 un joven de 17 años identificado con las iniciales A.G. también fue detenido luego de golpear a su madre y destruir parte de la vivienda de Ostoich al 1.200. El ataque de furia se habría producido luego de que la mujer no lo dejara quedarse a dormir con una jovencita que había llevado a la casa.
- 07 agosto 2017