Ezequiel Llesona: "estamos expuestos pero hay que evitar que haya casos"

El defensor de Huracán habló con El Patagónico sobre su trabajo en época de cuarentena y pandemia del COVID-19. Ha estado en los ingresos a la ciudad de Comodoro Rivadavia controlando los vehículos que pretendían ingresar a la capital petrolera, y actualmente está en el sector que desinfecta los supermercados por la noche.

A veces es más difícil arrancar un día de trabajo en medio de la cuarentena que marcar en un córner al mejor cabeceador de la zona. A Ezequiel Llesona le toca en medio de esta cuarentena un "laburo" complicado donde se expone al virus que paraliza al mundo pero lo toma con seriedad y compromiso.

Chubut no tiene casos de coronavirus, al igual que Formosa y Catamarca. En Comodoro Rivadavia se ajustaron las medidas en los ingresos terrestres a la ciudad para seguir de la misma manera. En aquel momento hace dos semanas, el defensor del "Globo" estuvo el Módulo Norte sobre Ruta 3 en un lugar difícil controlando los accesos.

“El primer día que me puse el mameluco, medio como que no quería, porque me daba miedo, más que nada por mis viejos que estoy con ellos y subirnos a los micros que venían de afuera, pero bueno tratamos de cuidarnos en lo que más podemos, sabemos que estamos expuestos, es la entrada de Comodoro y vienen de varios lugares", le contó a El Patagónico.

Llesona viene de una lesión que lo marginó un mes y medio de las canchas pero antes del parate obligado había vuelto a jugar frente a Rada Tilly en el barrio Industrial, ingresando desde el banco de suplentes. No sabía que iba a ser el último partido por un largo tiempo, pero ahora enfocado en el trabajo casi día y noche reconoce que el cambio de sector fue para mejor. "Ahora hace una semana estoy en otro sector, que se encarga de desinfectar comercios, supermercados, etcetera. Es control sanitario el sector, tiramos un productos llamado bagodril, que mata las bacterias, trabajamos hasta tarde, porque por ejemplo los supermercados tenemos que esperar que cierren y que no haya nadie, es un producto fuerte que por seis horas no puede entrar nadie", comentó sobre el trabajo que realiza ahora.

Prácticamente se cubre el cuerpo de pies a cabeza y se carga la mochila al hombro antes de ingresar a los supermercados de la ciudad por la noche. "Vamos con máscaras y todo el equipo de protección. Y con los entrenamientos se complica, porque prácticamente estamos ligado todo el día con el laburo", remarcó.

Llesona sabe que el momento que atraviesa el mundo es delicado, pero el igual que cuando le toca ingresar a una cancha con la camiseta del "Globo", aporta su granito de arena desde el lugar que le toca. "Estamos tratando de evitar que haya casos en la ciudad, trabajando en conjunto con Gendarmería, Policía y algunos sectores del municipio sabiendo que lo primero es eso, que tengamos casos para poder volver a la normalidad lo antes posible", sentenció.

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