En noviembre de 2003, Britney Spears editó “In the zone”, su cuarto disco de estudio, que incluyó uno de los hits más importantes de su carrera, “Toxic”. El videoclip del tema es inoxidable, con la artista poniéndose en personajes como una azafata súper sexy y una superhéroe.
La canción además tiene un sonido característico y quien consiguió imitarlo a la perfección es un perro, en un video que rápidamente se volvió viral en Twitter, consiguiendo más de 440 mil "me gusta".