El hallazgo de los cuerpos de Paloma Gallardo (16 años) y Josué Salvatierra (14 años) en un descampado de Florencio Varela ha generado conmoción y pedidos de justicia en la comunidad. Los jóvenes, que habían sido reportados como desaparecidos el jueves 30 de enero, fueron encontrados debajo de un puente cercano a la plaza de Bosques. La autopsia confirmó que ambos murieron por golpes contundentes en la cabeza, en un hecho que las autoridades califican como un doble homicidio violento.
Últimas imágenes y desaparición
La última vez que se vio con vida a Paloma y Josué fue a través de cámaras de seguridad. A las 18:05 del jueves, ambos fueron captados caminando juntos cerca de sus casas rumbo al gimnasio. Diez minutos después, otra cámara los registró cruzando las vías del tren Roca, cerca de la Avenida Calchaquí. Desde entonces, no se supo más de ellos hasta que sus cuerpos fueron encontrados en un descampado, cerca de la fábrica Champion.
Los padres de ambos adolescentes denunciaron su desaparición esa misma noche. Sin embargo, según relató Omar Gallardo, padre de Paloma, las autoridades policiales mostraron desidia al momento de tomar las denuncias. "En la comisaría 4ª se reían, decían que era una aventurita juvenil. Tardaron horas en buscar a los chicos", denunció el hombre.
Hipótesis del crimen
De acuerdo con las primeras investigaciones, el móvil del doble crimen podría haber sido un robo. Se presume que los jóvenes habrían entrado al descampado para estar a solas, momento en el que fueron atacados por al menos una persona. Las pertenencias de ambos, como los teléfonos celulares y una mochila, no fueron encontradas en el lugar.
El informe preliminar de la autopsia reveló que ambos adolescentes murieron por fracturas de cráneo provocadas por un golpe con un objeto contundente. Paloma, según el parte forense, no presentaba signos de abuso sexual ni lesiones defensivas, lo que sugiere que fue sorprendida. Por su parte, Josué habría intentado resistirse al ataque antes de ser asesinado.
El abogado de la familia Gallardo, Edgar García, planteó que el asesino o los asesinos conocían el lugar, ya que Josué era habitué del descampado porque solía ir allí con su padre a recolectar materiales reciclables. García también criticó la falta de preservación del lugar del crimen: "La escena no fue cuidada. Levantaron rastros y permitieron que el sitio se incendiara, lo que dificulta la investigación".
Indignación de familiares y vecinos
El padre de Paloma expresó su indignación ante la falta de respuestas inmediatas por parte de las autoridades y aseguró que no descansará hasta que se esclarezca lo sucedido. "Pensé en un posible secuestro... no quería que a mi hija le pase lo mismo que a Loan, que desapareció y nunca se supo nada. Exijo justicia para Paloma y Josué", declaró en medio de su dolor. También denunció haber observado marcas en el cuerpo de su hija que no han sido explicadas.
El lunes por la tarde, vecinos de Florencio Varela realizaron una marcha frente a la comisaría, exigiendo justicia y mayor seguridad en la zona. Con carteles y neumáticos encendidos, reclamaron que las autoridades esclarezcan el caso y garanticen que hechos como este no vuelvan a ocurrir.
La investigación sigue en curso
La causa está a cargo del fiscal Hernán Bustos Rivas, de la UFI N°5 de Florencio Varela, quien sigue trabajando en la reconstrucción de los hechos y en la identificación de los responsables. Mientras tanto, la comunidad de Florencio Varela pide respuestas inmediatas y un accionar más efectivo por parte de las fuerzas de seguridad.
El doble homicidio de Paloma y Josué ha dejado una herida profunda en Florencio Varela, donde el reclamo de justicia y seguridad sigue resonando con fuerza.