Rodeados de escombros y destrucción, los hospitales de la Franja de Gaza están al borde del colapso en medio de un corte eléctrico general que se suma a la escasez de insumos y personal médico, comprometiendo la atención de más de cinco mil heridos. Los proyectiles israelíes dañaron gravemente los aparatos que suministraban electricidad desde Israel, afectando las redes en numerosas provincias de este enclave palestino, que vive el quinto día de guerra entre Hamas e Israel. Además, varias ambulancias quedaron inutilizables y personal médico murió por los ataques.
"Nuestra capacidad está al límite y sólo podemos intentar mantener las vidas de los heridos", dijo el doctor Medhat Abás, vocero del Complejo Médico Al Shifa, el hospital más grande de la ciudad de Gaza. "Nos enfrentamos a una grave escasez de energía, suministros y recursos humanos", enfatizó el doctor Abás, al asegurar que el combustible que queda en los generadores de los hospitales "no durará más de cuatro días".
Al menos cuatro trabajadores sanitarios de la Media Luna Roja Palestina murieron este miércoles en un ataque del Ejército de Israel contra una ambulancia en el norte de la Franja de Gaza. El organismo llamó a frenar los "crímenes de guerra" y exigió que rindan cuentas "las autoridades de ocupación israelíes". Además detalló que los fallecidos son Jalil al Sharif, Yusri al Masri, Ahmad Dahman y Hatem Awad, sin que las autoridades de Israel se hayan pronunciado al respecto.
La Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja (IFRC) reiteró su llamado a todas las partes para que "respeten sus obligaciones legales en virtud del derecho internacional humanitario". "Esto no es negociable. Los civiles, el personal de salud, los centros de salud y las infraestructuras civiles deben ser respetados y protegidos en todo momento. No son un objetivo", afirmó.
El ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, ordenó el domingo un "cerco total" a la Franja de Gaza. Este miércoles el ministro de Energía Israel Katz insistió en ese punto al declarar: "Hemos decidido cortar el suministro de agua, electricidad y combustible, y ahora su central eléctrica local ha colapsado y no hay electricidad en Gaza".
"Seguiremos reforzando el asedio hasta que la amenaza de Hamás sobre Israel y el mundo sea eliminada", expresó Katz en un comunicado. Este estrecho territorio está aislado y bloqueado por aire, tierra y mar por el Estado judío y Egipto desde 2007, cuando Hamas tomó el poder.
Fuente: Página 12