Tal como lo adelantara El Patagónico, el martes por la noche la vivienda de la familia Nieves, del barrio Quirno Costa, fue baleada y Antonio Nieves recibió un disparo en el rostro que lo dejó gravemente herido.
El padre de la conflictiva familia no alcanzó a esconderse y uno de los plomos de 9 milímetros atravesó las paredes de chapa de la casa y se le incrustó en la cara.
Hasta el momento, el hombre se encuentra fuera de peligro, mientras la policía y la Brigada de Investigaciones intentan establecer quién o quiénes fueron los autores del tiroteo contra los Nieves.
Ante el temor de que los enfrentamientos se recrudezcan en los próximos días, durante el fin de semana se intensificará el patrullaje policial en la zona conocida como La Saladita.
Desde la dependencia policial explicaron: "estamos haciendo patrullajes por todo ese sector y se han pedido refuerzos a la Unidad Regional, sobre todo para el fin de semana".
"Es un peligro que está todos los días latente, por eso se quiere reforzar la seguridad", afirmaron desde la fuerza.