Apenas se le veía, pero protagonizó una de las imágenes del año: la de la excavadora tratando de desencallar al enorme buque Ever Given, atascado en el Canal de Suez. Dentro de esa cabina estaba él, Abdullah Abdul-Gawad, el conductor de aquella máquina que, junto al mastodonte, parecía apenas un pequeño insecto.
En declaraciones a Business Insider, Abdul-Gawad, de 28 años, asegura que durante esos días trabajó junto con sus compañeros 21 horas seguidas tratando de sacar aquel inmenso barco de allí. Este joven operario explica que para acceder a la proa del Ever Given tuvo que construir un puente improvisado con los escombros que excavó.
El trabajo llevó horas y horas de excavar mientras los remolcadores trataban de tirar del barco. Al segundo día de trabajos ya había memes con la foto en la que la excavadora parecía diminuta frente al buque. Y eso le motivó: “Te ríes de mí, pues voy a demostrar que puedo hacerlo”, afirma que pensó.
Él y sus compañeros descansaron en un cuartel que usaban los guardias fronterizos y apenas dormían tres horas por noche. Hubo un día en el que sólo durmieron una hora. “Sabían que si nos íbamos a casa no nos verían en ocho o nueve horas”.
Terminado el trabajo y con el Canal de Suez ya liberado, Abdul-Gawad asegura que todavía nadie les ha pagado las horas extra por todo el trabajo realizado. “Es un logro para Egipto, primero, pero también para mí. Es una cosa que ocurre una vez en la vida o quizás dos. Es algo por lo que estar orgulloso”.