Un testigo confirmó la versión que involucra a Soto y Serrano en el crimen de Anahí Copa

El testigo de identidad reservada que ofreció la Fiscalía desde el inicio de la investigación confirmó ayer en el juicio contra Rodrigo Soto y Diego Serrano que fueron ellos quienes en la madrugada del 8 de diciembre efectuaron disparos desde el auto de Soto. Los vio cuando salió a cerrar el portón de su casa y tuvo que tirarse al suelo ante la balacera. Uno de esos tiros fue el que mató a Anahí Tamara Copa mientras amamantaba a su bebé. Hoy continuará el juicio.
El juicio oral y público por el homicidio de Anahí Tamara Copa (22) se inició ayer a las 8 en la sala principal de audiencias de la Oficina Judicial de Comodoro Rivadavia, tal como lo adelantó El Patagónico.
El tribunal colegiado que fue designado a tal fin está presidido por la juez penal, Gladys Olavarría y se completa con los jueces, Daniela Arcuri y Miguel Angel Caviglia. El Ministerio Público Fiscal está representado por la fiscal general, Camila Banfi, mientras que a los imputados los asisten las defensoras públicas, Viviana Barillari y Lucía Pettinari, en el caso de Diego Armando Serrano (28), y el abogado particular Alejandro Fuentes asesora técnicamente a Rodrigo Soto (25).
En la primera audiencia declararon los acusados y ambos mantuvieron la versión brindada en ocasión del control de detención, señalando que nada tuvieron que ver con el hecho. Soto recordó que ese día estuvo en la zona céntrica en su auto y como tenía problemas, porque habían querido incendiárselo días antes, lo dejó guardado en la casa de un amigo en el Cordón Forestal.
Agregó que al día siguiente fue a la casa de sus padres porque allí estaba su hija, y llegó la policía a detenerlo. También aclaró que fue él quien le dijo a la policía dónde estaba guardado su auto.
Por su parte Serrano reconoció que es amigo de Soto pero afirmó que la noche que ocurrió el hecho él estaba con otra gente y acudió a auxiliar a un amigo que había tenido problemas con su auto.

TESTIGO CLAVE
La fiscal Camila Banfi le hizo saber al tribunal que se encontraba en el edificio el testigo de identidad reservada que ofreció desde el inicio de la investigación, y oportunamente en la audiencia preliminar, por lo que solicitó que declare sin presencia de público, ni imputados. Si bien las defensas se opusieron, los jueces hicieron lugar al planteo de la acusadora pública y permitieron que declare bajo las condiciones mencionadas.
En ese contexto, el testigo contó que a la 1:40 de la madrugada del 8 de diciembre de año pasado salió de su casa a cerrar el portón y en ese momento observó el Gol blanco de Rodrigo Soto. A este último lo ubicó en el lugar del acompañante, mientras que sobre Diego Serrano dijo que iba manejando el auto.
"Soto sacó la mitad del cuerpo por la ventanilla y comenzó a disparar. Yo me tiré al piso y parecía que los tiros iban hacia mi casa. Fueron varios disparos, cinco por lo menos. Después llegó la policía y fue para la casa de Copa", sostuvo.
A ese testimonio le siguió el de un joven salteño que momentáneamente estaba viviendo en la casa que Anahí Copa compartía con su marido y los dos hijos.
"Ellos me dejaron quedar ahí por un tiempo porque no tenía dónde estar. Un día ella fue a comprar y yo quedé con los nenes y balearon la casa. Un montón de tiros. Después con el marido de Anahí fuimos a hablar con los vecinos, una familia de apellido Nieves. Le preguntamos a qué se debían los tiros y nos dijeron que tenía problemas con alguna gente, pero le hicimos saber que así no eran las cosas, que las arreglen porque en la casa había niños y alguien podía salir lastimado", sostuvo.
El hombre dijo que trabajaba en la construcción y le propuso a Anahí y a su marido hacer un paredón para protegerlos de las balaceras y se encargó de esa tarea.
"Unos días antes de lo que le pasó a Anahí, yo estaba armando los hierros para la base del paredón y pasó un coche blanco y tiró como cinco tiros. Me toqué el cuerpo buscando alguna herida porque pensé que me habían dado, pero no tenía nada", agregó.
Ayer también declararon los policías de la Brigada de Investigaciones que trabajaron en la causa. El debate continuará hoy y se conocerán nuevos testimonios de los testigos ofrecidos por la Fiscalía.
Hay que recordar que el homicidio de Anahí Copa se produjo cerca de la 1:40 del 8 de diciembre del año pasado, cuando una de las balas que iría dirigida a la casa de la familia Nieves atravesó la frágil pared de chapa de su dormitorio y le dio en el pecho. Al otro lado estaba tomando la teta su bebé.

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