Esta tarde alrededor de las 15:30 el oficial Rojas de la Brigada de Investigaciones reconoció el rostro de Rubén "Polar" Curillán mientras caminaba por la intersección de Rivadavia y Viamonte.
Atento a los movimientos del hombre decidió iniciar un seguimiento a pie hasta tener certeza de la identidad del hombre para solicitar refuerzos. Recién en la avenida Ducós, interceptó a Curillán y se procedió a su inmediata detención con apoyo del personal de la Seccional Primera, según indicaron a El Patagónico.
Cabe señalar, que el pedido de detención del hombre constaba a través de un pedido de la Oficina Judicial con la firma de la doctora Raquel Tasello y Fiscalía.
EL ATAQUE
El 23 de septiembre de 2016 a las 20:45, Curillán interceptó a Mansilla en la calle Los Plátanos al grito de: "¡mirá cómo te viniste a regalar puto!", ambos se conocían por disputas vinculadas a un gremio de la construcción. Luego de increparlo, el agresor le disparó en tres oportunidades. En esos momentos el padre de Mansilla pasaba por el lugar y se encontró con su hijo malherido. Lo cargó al auto y trasladó hasta la guardia del Hospital Regional.
Los proyectiles de grueso calibre le perforaron los intestinos y le afectaron el estómago. Tras una semana de permanecer internado en grave estado en terapia intensiva, el herido comenzó a recuperarse, aunque su rehabilitación total le demandará tiempo prudencial.
Después del hecho se hicieron cuatro allanamientos en el domicilio de Curillán y de sus familiares sobre la calle Los Ciruelos, allí los investigadores secuestraron cuatro armas de fuego, dos revólveres calibre 22 y 38, y dos de fabricación casera denominadas "tumberas", pero de él no se encontraban rastros.