El miércoles se conocerá la pena que cumplirá el violador

La fiscalía pretende que Jonathan Barría, quien fue declarado penalmente responsable del abuso sexual a una mujer, cumpla 12 años de prisión. Su defensa, en cambio, planteó una pena de 6 años y 8 meses. El tribunal dará a conocer su resolución el miércoles.

Este viernes se desarrolló en los tribunales penales de Comodoro Rivadavia la audiencia de cesura –o imposición de pena- en el juicio oral por abuso sexual donde el imputado Jonathan Barría ya fue declarado penalmente responsable. En virtud de las circunstancias agravantes y atenuantes del caso, el fiscal solicitó se le imponga la pena de 12 años de prisión. Mientras, la defensora planteó la pena de 6 años y 8 meses de cárcel.

Finalmente, el tribunal pasó a deliberar y el miércoles a las 12, por videoconferencia dará a conocer su resolución. Al mismo tiempo, los jueces prorrogaron la prisión preventiva que pesa sobre Barría por seis meses, luego de que el último martes Barría fue declarado, por unanimidad, penalmente responsable del delito de “abuso sexual con acceso carnal, dos hechos, en concurso real” en calidad de “autor”.

El tribunal de debate fue presidido por la jueza Daniela Arcuri, e integrado por sus pafes Raquel Tasssello y Martín Cosmaro. El Ministerio Público Fiscal fue representado por Martín Cárcamo, fiscal general y Cristian Ovalle, funcionario de fiscalía; en tanto que la defensa del imputado fue ejercida por Cristina Sadino, defensora pública.

La víctima fue acompañada y asistida por profesionales del Servicio de Asistencia a la Víctima del Delito (SAVD) de fiscalía.

El fiscal Cárcamo, en virtud de la declaración de responsabilidad penal del imputado Barría, solicitó la pena de 12 años de prisión; más la imposición de tratamiento terapéutico -psicológico vinculado con la temática de la agresión sexual y de sus adicciones.

El imputado no presenta signos o síntomas para sospechar de una enfermedad mental, según el Informe psiquiátrico del Cuerpo Médico Forense, expuso el acusador público.

“La circunstancia de intoxicación no ha tenido incidencia en el modo de acción de Barría, que actuó contrario al mandato prohibitivo. No debe operar esa circunstancia como un criterio subjetivo de atenuación de la pena”, señaló.

Como circunstancias agravantes el fiscal consideró: “la naturaleza de la acción, estamos ante un caso de violencia de género, los medios empleados para concretar el abuso sexual, la víctima fue trasladada mediante intimidación. La nocturnidad en la que fue cometido el hecho y también por la extensión del daño causado, como circunstancia agravatoria, Por las secuelas que ha dejado el hecho en la víctima, estrés post-traumático, sosteniendo que le había arruinado la vida”.

Como atenuante consideró el fiscal la ausencia de antecedentes penales del imputado y que es padre de dos niños menores de edad “y la pena no debe trascender a terceros”.

Por último, el fiscal solicitó que se mantenga la medida de prisión preventiva hasta tanto la sentencia quede firme.

La defensora, en cambio, propuso el mínimo de pena establecido para el delito. Respecto de la naturaleza de la acción como agravante, la abogada planteó que no debe considerarse, dado que el delito por el cual se lo responsabilizó a su asistido ya contiene tal agravante.

La defensora argumentó que la nocturnidad no se traduce en mayor desprotección de la víctima, según lo que surgió en el debate. “En cuanto a la extensión del daño, ¿cómo se puede medir, si no tenemos una historia clínica de la víctima?”, interrogó.

A su criterio no está comprobado un mayor daño psicológico que amerite un incremento de pena.

Expuso que su defendido no tiene antecedentes penales y fue padre a los 15 años.

Según el informe, Barría tiene dificultad para expresar sus emociones, baja tolerancia a la frustración, y esto en situaciones de estrés le produce una alta probabilidad de tener conductas impulsivas, afirmó.

Tiene un bajo control de impulsos y esto con drogas y alcohol se potencia. Su confesión fue sincera, junto con el pedido de perdón a la víctima, señaló Sadino. Por todo ello, defensora requirió la pena de 6 años y ocho meses de prisión.

AMENAZAS Y ABUSO

Según la reconstrucción que la fiscalía efectuó para la acusación, el caso de abuso sexual se produjo el 30 de enero de 2019, cuando la víctima se encontraba en una parada de colectivos de Huergo y Los Pensamientos, del barrio San Martín.

Al advertir la presencia de varios hombres, la víctima caminó hacia la avenida Rivadavia. Antes de llegar a la altura de una estación de servicio, Barría se le acercó y mediante la utilización de un arma blanca la obligó a que la acompañara, diciéndole “vení, dale hagamos como si fuéramos novios”.

Manteniendo el arma blanca contra su cuello, Barría obligó a la víctima a caminar hasta un descampado donde bajo amenazas, la sometió sexualmente.

Fuente:

Notas Relacionadas

Dejá tu comentario

Las Más Leídas del Patagónico