El papa Francisco pidió ayer rezar a la Virgen de Aparecida para que proteja "a todo Brasil y a todo el pueblo brasileño, en este momento triste", tras la destitución de Dilma Rousseff como presidenta y la jura de Michel Temer para ocupar ese cargo.
Además, durante la inauguración de una pequeña estatua de bronce de la patrona de este país en los jardines vaticanos, el pontífice explicó que no sabe si será posible visitar Brasil en 2017 como había prometido en 2013 durante su viaje a este país para la Jornada Mundial de la Juventud.
"En 2013 había prometido que volvería el próximo año. No sé si será posible, pero al menos la tendré (a la Virgen) aquí más cerca", explicó.
Francisco también invitó a rezar para que la Virgen de Aparecida proteja a los más pobres, a los descartados, a los ancianos abandonados, a los niños de calle y a los que caen en las manos de los explotadores de todo tipo y para que salve a su pueblo con la justicia social y con el amor de Jesucristo".
El papa Bergoglio recordó que la imagen de la Virgen de Aparecida fue encontrada por unos trabajadores pobres y deseó que pueda ser hallada "por todos, y especialmente por todos aquellos que necesitan trabajo, educación y los que son privados de su dignidad", consignó la agencia EFE.
La iniciativa de regalar la imagen de la Virgen a los Jardines Vaticanos fue de la Embajada de Brasil ante la Santa Sede y de la Archidiócesis de Aparecida.
Brasil es centro de manifestaciones, disturbios, ataques a tiendas y bancos y represión con gases lacrimógenos desde hace tres noches pidiendo la renuncia del presidente Temer, tras la destitución de Rousseff por parte del Senado.
Por otro lado, Salvador Sánchez Cerén, el presidente de El Salvador, anunció ayer que revisará el estado de las relaciones diplomáticas con Brasil ante el "golpe" que acabó con el gobierno de Dilma Rousseff.
"Estamos dando seguimiento a lo que está sucediendo en Brasil para proceder a dar otros pasos y estamos dispuestos a dar otros pasos, porque no vamos a permitir que en América Latina se imponga una modalidad de golpes de Estado suaves", dijo el jefe de Estado.
Sánchez Cerén no hizo precisiones sobre los "otros pasos" que está dispuesto a dar, lo que dio paso a especulaciones sobre una posible ruptura de relaciones o un llamado a consultas para su embajador en Brasil.
Para el presidente de El Salvador, en el juicio político a Rousseff "no se ha comprobado la responsabilidad criminal" de la mandataria, ahora reemplazada por Michel Temer.
"Ese proceso atenta contra la estabilidad democrática y contra los avances políticos de la región y de integración", advirtió en una declaración difundida por EFE.
En el contexto de la "ola desestabilizadora" que a su juicio afecta a América latina, Sánchez Cerén insertó también a las protestas de la oposición venezolana para lograr una convocatoria a un referendo revocatorio del mandato de Nicolás Maduro.
Sánchez Cerén pertenece al partido Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) y fue miembro de la disuelta organización político militar Fuerzas Populares de Liberación Farabundo Martí (FPL).
- 04 septiembre 2016