El uso del celular se ha convertido en una parte fundamental de la vida cotidiana, pero especialistas en salud mental advierten sobre los riesgos de exceder el tiempo de uso recomendado.
Según expertos, la utilización del dispositivo no debería superar las dos horas diarias. Pasar más tiempo frente a la pantalla, especialmente si se alcanza o supera el umbral de cinco horas al día, puede tener consecuencias negativas, como la aparición de episodios de ansiedad o depresión.
Aunque se considera que usar el teléfono entre dos y cinco horas diarias no es preocupante, se clasifica como un uso excesivo. Sin embargo, cuando este tiempo supera las cinco horas, el riesgo aumenta considerablemente. Los especialistas subrayan la importancia de establecer límites y fomentar un uso responsable.
Para aquellos que buscan reducir el tiempo frente al teléfono y evitar posibles daños a la salud mental, los expertos sugieren una serie de estrategias:
- Evitar aplicaciones que generen ansiedad o sean adictivas: Redes sociales y juegos son algunas de las aplicaciones que más tiempo consumen y suelen estar asociadas con episodios de ansiedad.
- Realizar un uso consciente y necesario del dispositivo: Limitar el uso del móvil a tareas específicas, como enviar mensajes o realizar llamadas importantes, puede ayudar a controlar el tiempo frente a la pantalla.
- Buscar actividades fuera de lo digital: Caminar, estar en contacto con la naturaleza y practicar actividades físicas son excelentes formas de despejar la mente y reducir la dependencia tecnológica.
Además, los especialistas recomiendan establecer tiempos "libres de pantallas", como durante las comidas o antes de dormir, para mejorar la calidad del descanso y el bienestar general.