Eran las 9:40 de aquel domingo y un agente de policía se encontraba durmiendo en su domicilio ubicado en Malvinas Norte al 1.100, barrio Las Flores. Estaban con él ese día su pareja, su hijo de un año y medio de edad, su suegra y otras dos personas.
Fue entonces cuando aparecieron Daniel Alberto Millapi y Nahuel Maximiliano Silveira (prófugo hasta hoy), quienes tras golpear la puerta dijeron ser personal policial que debía realizar una diligencia de allanamiento en el lugar.
La suegra de la víctima les dijo que no se trataba del domicilio que buscaban y se retiraron, pero instantes después regresó Millapi, insistió y cuando nuevamente la suegra de la víctima intentó cerrar la puerta, ingresó por la fuerza.
Una vez en el interior, Millapi extrajo un arma de fuego y comenzó a forcejear con las víctimas exigiendo dinero. El policía reaccionó y lo primero que hizo fue sacar de la casa, por la ventana, a su pareja y a su hijo. Luego salió con su arma reglamentaria 9mm, marca Taurus, y enfrentó a los delincuentes.
Millapi le apuntó con el arma de fuego y tras un forcejeo le quitaron su arma para luego escapar en dirección a calle Los Aromos y ascender a un Chevrolet blanco que se encontraba estacionado en el Pasaje Santa María y Los Aromos.
El tribunal de debate está conformado por los jueces Mónica García, Raquel Tassello y Daniela Arcuri; el Ministerio Público Fiscal lo representan Martín Cárcamo y Facundo Oribones, en tanto que la defensa de Millapi la ejerce Sergio Romero, abogado particular.
Entre los testimonios del día estuvo el de un oficial principal que al momento del hecho se encontraba de servicio en la Seccional Cuarta y que recordó que ese día recibió un llamado de otro suboficial contándole que habían ingresado dos personas armadas a la vivienda de un policía y le habían sustraído el arma reglamentaria. Decían tener una orden de allanamiento y luego de cometer el hecho escaparon por una escalera para huir en un auto color blanco.
Otro de los testimonios de la fecha fue el de la víctima, ratificando lo expuesto por la Fiscalía y reconociendo en la sala a Millapi como uno de los delincuentes.