La obra del Cerro Chenque podría estar lista en febrero

Las autoridades estiman que los trabajos en la zona de riesgo de desmoronamientos, sobre la ladera que colinda con la Ruta 3, comenzarán entre los últimos días de enero y la primera semana de febrero.

Esta vez parece que la obra de estabilización del Cerro Chenque será una realidad. Los trabajos podrían llevarse a cabo entre los últimos días de enero y la primera semana de febrero. Así lo informó el secretario municipal de Infraestructura de Comodoro Rivadavia, Maximiliano López.

En diálogo con La Cien Punto Uno, el funcionario reconoció que es un tema complejo porque involucra a una ruta nacional, pero también tiene una trama urbana. Es por eso que se avanzó con un convenio entre Vialidad Nacional y la Municipalidad para financiar las tareas de demolición controlada del sector medio del cerro, donde hay peligro de derrumbe, como ya sucedió durante el temporal de lluvia de septiembre último.

“Tenemos el convenio firmado, pasó por el Concejo y nos están pre adjudicando estos fondos. Supuestamente esta semana y llegarían esa última autorización y, a partir de ahí, el municipio comenzaría la contratación de estas tareas”, subrayó López.

El titular de la cartera de Infraestructura explicó que no se pudieron hacer los trabajos antes porque estaban muy cerca de las fiestas de fin de año y podría generar un caos mayor con la circulación de los automovilistas. “Ahora es el momento ideal para hacerlo porque hay menos tránsito. Antes de febrero o a principios de febrero queremos tener esta situación resulta”, aseguró.

La obra de estabilización permitirá prevenir otro derrumbe como el que se ocasionó el 21 de septiembre del 2022. “Una vez que se demuelan en la parte media tenemos que sacar los escombros. Tenemos la idea de ir rellenando en la parte detrás de (la estación de servicio) Eureka y el Cerro Chenque y mejorar los guardarais. Ahí terminaría esa etapa”, detalló.

La idea de los funcionarios es completar la primera etapa vinculada a la estabilización del sector y avanzar con una segunda fase que sería el aterrazamiento del cerro. “Lo que buscamos es garantizar el tránsito en la zona”, consideró.

En el plan que tienen las autoridades también se incluye un sistema pluvial para evitar futuros movimientos del suelo.

NUEVOS PLAZOS

El 21 de septiembre pasado se produjo un desprendimiento en la parte este del Cerro Chenque. La roca llegó hasta la ruta Nacional 3 y generó un gran caos vehicular en los automovilistas que querían dirigirse desde la zona norte hacia el Centro.

Tal como viene informando este diario, el jefe de Vialidad Nacional en Chubut, Julio Otero, se reunió con funcionarios municipales y concejales para comentar las medidas que se tomarían para llevar tranquilidad en ese tramo de la ruta Nacional 3.

La primera acción que se encaró fue un monitoreo de la zona donde un grupo de geólogos se instalaron con un tráiler para observar el movimiento de los bloques. Esa casilla fue retirada hace pocas semanas debido a que los profesionales continúan el monitoreo con drones y se puede acceder a pie al sector crítico. Según el subsecretario de Ambiente municipal, Daniel González, el movimiento de los bloques más grandes es de alrededor de un milímetro por lo que se puede decir que “el cerro está tranquilo”.

La segunda medida fue construir una barrera donde se desprendió la roca el 21 de septiembre. La misma fue construida con caños tubing, que se usan en la industria petrolera, y guardarais para amortiguar cualquier tipo de desprendimiento. En paralelo, solo se habilitó un solo carril para dirigirse desde zona norte hacia el Centro y dispuso que el personal de Tránsito controle a los automovilistas.

El plan consiste en sacar entre 4 mil a 7 mil toneladas de roca y brindar seguridad a los automovilistas que transitan diariamente la ruta Nacional 3. Para llevar a cabo este operativo se utilizarán microexplosiones con gases.

Además, los trabajos de limpieza se llevarán a cabo con una cargadora y camiones de Vialidad Nacional que serán traídos desde Buenos Aires. Sin embargo, no se descarta utilizar equipos viales de la Municipalidad para acelerar los tiempos.

La primera fecha que dispuso Otero para realizar los trabajos fue el 10 y 12 de noviembre con el objetivo de no interrumpir el tránsito. Otra alternativa posible era entre el 18 y 20 de noviembre.

A casi cuatro meses del último desmoronamiento, parece que esta vez sí se llevarán a cabo en la ruta Nacional 3.

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