El candidato presidencial por La Libertad AVanza, Javier Milei, no deja de sumar polémicas por su histriónico modo de hablar y, otra vez, volvió a llamar la atención por sus comparaciones que no dejan de asombrar. Si se aplicara la idea de realizar un examen psicotécnico a los candidatos que participan de las elecciones, ¿qué diría un psicólogo de estos dichos?
Esta vez se volvió viral su participación en un programa de televisión, cuando al ser consultado por el sistema de coparticipación que rige en la Argentina, Milei lanzó una llamativa respuesta que dejó a todos atónitos.
"A ver, y, pero, digamos, o sea a usted le parece que, digamos, o sea, es un equilibrio realizable... suponga que usted tiene, digamos, o sea, que usted tiene una hija y de repente hay alguien que tiene una adicción a tener violación a mujeres, o sea y su hija es víctima... y dicen 'no, es una posición más radicalizada'. No, hay que terminar. Terminar con el sistema de coparticipación, hay que barrerlo", lanzó Milei en TN.
Una de las más llamativas fue cuando comparó al Estado con un pedófilo. "El Estado es el pedófilo en el jardín de infantes con los nenes encadenados y bañados en vaselina. Y los políticos son los que ejecutan el Estado. Entonces tenemos que entender que nuestros verdaderos enemigos son los políticos", dijo el candidato presidencial a Luis Novaresio en octubre de 2018, cuando aún no aparecía en el radar como posible candidato; era, más bien, un economista excéntrico que rotaba en los programas de TV.
Su fijación con los pedófilo venía de un año atrás cuando en la red social X escribió: “La corporación política es más peligrosa para el capital que un ejército de pedófilos con síndrome de abstinencia en un jardín de infantes”.
En 2017 también usó otro ejemplo relacionado a lo sexual al aseverar que “la capacidad del Gobierno para satisfacer las necesidades de bienestar son similares a la de un eyaculador precoz ante una mujer ardiente”.
Así, Milei no solo comparó al Estado con "un pedófilo", con un eyaculador precoz o con la mafia, sino que además calificó a las ideas con las que antagoniza como enfermedades mentales, o directamente avalar la contaminación de los ríos, la venta de órganos o de niños.