Esto no es algo que implique ningún tipo de preocupación, sino que es una técnica conocida como "cupping" que se volvió muy popular entre los nadadores y otros atletas.
El Cupping se utiliza para ayudar en las áreas problemáticas para los nadadores. Son ventosas que se aplican sobre el cuerpo, y ayudan a mejorar el flujo sanguíneo a los músculos que tienen dolor.
Las manchas son el resultado de ese proceso y pueden permanecer visibles durante dos y tres semanas.
Phelps no es el único deportista que utiliza esta técnica en los Juegos Olímpicos. El equipo de Gimnasia artística de EE.UU. y la nadadora Natalie Coughlin, también son fieles seguidores de este proceso.