El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, y el jefe de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), Rodrigo Londoño, alias Timochenko, suscribirán hoy en Cartagena de Indias el histórico acuerdo de paz que pone fin a un conflicto armado de más de 50 años, ante 15 jefes de Estado y otros altos representantes de gobiernos extranjeros, y en medio de un inusual dispositivo de seguridad.
La ceremonia, que tendrá lugar a partir de las 17 (las 19 en la Argentina), en el Centro de Convenciones de esa ciudad, durará unos 70 minutos y será presenciada por más de 2.500 invitados, locales y extranjeros, cuya ubicaciones en la platea se determinarán por sorteo, como un símbolo de la reconciliación.
Junto a Santos y a Timochenko se ubicarán en la mesa principal los jefes de los equipos del gobierno y las FARC que negociaron el acuerdo durante casi cuatro años en La Habana, el ex vicepresidente Humberto de la Calle y Luciano Marín, alias Iván Márquez, respectivamente.
De la Calle y Márquez ya firmaron el acuerdo el 24 de agosto pasado en la capital cubana, junto a los representantes de los países garantes (Cuba y Noruega) y acompañantes (Chile y Venezuela) del proceso de negociación que había comenzado formalmente el 19 de noviembre de 2012.
Cuba, Chile y Venezuela estarán representados en la cita de mañana por sus presidentes, Raúl Castro, Michelle Bachelet y Nicolás Maduro, y Noruega, por su canciller, Borge Brende.
También presenciarán el histórico acto el secretario general de la Organización de Naciones Unidas (ONU), Ban Ki-moon; el secretario de Estado del Vaticano, Pietro Parolin -quien oficiará una misa en el lugar-, y los titulares del Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional, Yinm Yong Kim y Christine Lagarde.
Asimismo, se espera que asistan, entre otros, los presidentes de la Argentina, Mauricio Macri; Bolivia, Evo Morales; Brasil, Michel Temer; Ecuador, Rafael Correa; México, Enrique Peña Nieto; Paraguay, Horacio Cartes, y Perú, Pedro Pablo Kuczynski.
Además, figuran entre los invitados el secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry; el rey emérito de España, Juan Carlos de Borbón, y varios cancilleres.
Santos y Timochenko están desde el sábado en Cartagena de Indias, cuyo centro es conocido como "la ciudad amurallada" y que esta vez está custodiada por más de 4.000 efectivos de fuerzas armadas y de seguridad, y 23 aeronaves de la Fuerza Aérea.
Del dispositivo de vigilancia también forman parte "cuatro buques de la Fuerza Naval del Caribe y 10 unidades de guardacostas", así como "buzos tácticos", que se encargarán de la custodia de la bahía de Cartagena, detalló el comandante de ese grupo, contralmirante Evelio Ramírez.
Asimismo, en la ciudad estarán prohibidos hoy el uso de motocicletas, las manifestaciones y la venta y el consumo de bebidas alcohólicas en espacios públicos.
Paralelamente, en los aeropuertos de Cartagena y de la vecina Barranquilla se dispusieron planes de contingencia para garantizar la atención y el arribo con normalidad de los numerosos invitados.
Las FARC dieron su "respaldo unánime" al acuerdo el viernes, al cabo de una semana de deliberaciones internas en las que resolvieron ampliar su estado mayor de 29 a 61 miembros y celebrar próximamente otra "conferencia" para determinar "las tareas políticas por venir".
Márquez dijo entonces que si todo marcha de acuerdo a lo previsto, "a más tardar en mayo las FARC se estarán reuniendo por primera vez como grupo político".
Tras la ceremonia de hoy, los ciudadanos de Colombia deberán refrendar o rechazar el acuerdo en un plebiscito que se celebrará el domingo.
En caso de que la consulta tenga resultado positivo, los cerca de 8.000 efectivos de las FARC deberán empezar a concentrarse en 27 zonas del país ya definidas durante 180 días, lapso durante el cual entregarán sus armas a la Organización de Naciones Unidas.
- 26 septiembre 2016