Luego de una investigación que demandó más de un año, la Fiscalía pidió la detención de seis hombres y una mujer. Esta última resultó ser Kesen, la madre de la hija de Expósito Moreno. Ella y su novio, Sergio Solís, fueron llevados a juicio por el crimen.
Expósito Moreno era un ciudadano español, oriundo de Andalucía, que había llegado a Comodoro Rivadavia para obtener la tutela de la hija que tenía con Kesen y que había sido traída por ésta desde España.
Luego de engorrosos trámites, finalmente los tres viajarían a España a discutir allí la tenencia de la nena, a lo cual Kesen se habría negado sistemáticamente. Incluso un primer viaje había sido suspendido porque la mujer argumentó que había extraviado el pasaporte de la nena, por lo cual el Consulado le iba a entregar uno nuevo en el mismo Aeropuerto Mosconi antes de emprender el viaje a Madrid. Pero cinco días antes de ese viaje Expósito Moreno fue asesinado.