“Nada se ha modificado en cuanto a la decisión que se tomó en un procedimiento abierto, público y transparente, con objeciones que tienen que ser escuchadas y atendidas” dijo en rueda de prensa por el proceso de audiencias públicas que permitieron que continúe la obra tras un amparo judicial y modificación del proyecto.
La obra hidroeléctrica está a cargo de una UTE que componen las empresas argentinas Hidrocuyo y Electroingeniería S.A. cuyos titulares están detenidos en la causa que investiga el supuesto pago de coimas en la contratación de obra pública.
La tercera pata empresaria de la UTE que es la china Gezhouba Group Corp asumió el liderazgo de Represas Patagonia, informaron a Télam fuentes empresarias.
Bergman destacó la decisión presidencial de continuar la obra “en función de los compromisos internacionales globales que estaban asumidos” por el Gobierno anterior con China.
También destacó “el objetivo planteado" por la administración de Mauricio Macri, "con la quita de subsidios extorsivos y de entender que sin energía no hay crecimiento, desarrollo, ni erradicación de la pobreza”.
Por eso señaló “la necesidad de infraestructura y desarrollos para el autoabastecimiento y diversificación de la matriz energética”.
Bergman mencionó además “el compromiso de agenda 2030 de migrar de un 8 a un 25 por ciento de energías renovables”.
El funcionario visitó El Calafate para supervisar la planta de tratamiento de residuos sólidos urbanos que se construye a 10 kilómetros de esa ciudad turística ubicada a 300 kilómetros de Río Gallegos, la capital provincial, con financiamiento del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y del Gobierno nacional.