Durante su visita a La mañana de Moria (eltrece), Florinda Meza volvió a instalarse en el centro de la conversación pública al tocar uno de los temas más sensibles de su historia: la herencia que dejó Roberto Gómez Bolaños. En un país donde el universo de El Chavo del 8 sigue siendo un fenómeno cultural, muchos siempre imaginaron que el creador del programa había acumulado una fortuna gigantesca. Pero la actriz sorprendió al ponerle números a esa fantasía.
La charla comenzó con la dinámica afilada de Moria Casán, que no dudó en llevar la entrevista al terreno más picante: la relación de Florinda Meza con los hijos del comediante. Y fue ahí cuando la actriz lanzó una frase que cambió el clima del estudio: “Los incluyó en mi vida. A los hijos los incluyó en mi vida”.
La réplica de Moria llegó inmediata y sin filtro: “¿A vos te incluyó en la herencia?”. La respuesta, breve pero contundente, dejó al público boquiabierto: “Poquito, poco”. La frase, dicha con naturalidad, derribó de un golpe la idea de que la actriz había heredado una fortuna millonaria.
Cuando la conductora quiso saber por qué había recibido tan poco, Florinda fue clara: “Porque así es. Pero a mí no me importa. Nunca le pedí dinero para el gasto de la casa”. Lejos de mostrarse resentida, explicó que durante su vida en común aportaba la mitad de los gastos e incluso cubría algunas compras personales de Roberto Gómez Bolaños. Ese detalle pintó una escena distinta a la que solía instalarse en el imaginario popular.
Enseguida, Florinda Meza dejó ver su enojo por cómo algunas producciones retrataron a su esposo, especialmente la serie Sin querer, queriendo: “Eso no es una biografía, es un cuento. Nada de ahí es cierto. Dime si conoces algún cuento donde la madrastra sea la heroína. No, ¿verdad? Pero lo que fue detestable es que ensuciaran su memoria, su legado".
La actriz insistió en que el verdadero Roberto estaba lejos de la imagen que intentaron construir en esa ficción. “Fue un gran padre, un gran marido, un gran ex marido [...] lo de él se usaba en su familia, no en mí”, explicó, remarcando que ella manejaba su propio dinero y que no dependía económicamente de él.
Pero la revelación más fuerte llegó cuando respondió a quienes la acusan de haberse quedado con todo: “Si hubiera sido una ambiciosa trepadora, los hijos no habrían recibido en el 2006 ante notario, a instancia mía, casi un millón de dólares cada uno. Dinero que yo ahorré, que yo administré de nuestro trabajo y que de ahí se tomó”. Con esa frase, dejó claro que el reparto del dinero se hizo por pedido suyo y que ella no actuó en su propio beneficio.
Ya sobre el final, y frente a la pregunta de Moria sobre su rol en ese proceso, la actriz confirmó: “Él dejó de trabajar, pero yo seguí trabajando, seguí produciendo. Y en la época más productiva de mi vida, yo dejé todo para estar con él y cuidarlo. Era una enfermedad muy demandante. Él murió de Parkinson”.
Entre datos, confesiones y heridas que todavía duelen, Florinda Meza terminó de desmontar el mito: la historia económica de Roberto Gómez Bolaños fue muy distinta a lo que siempre se creyó y la herencia, también.