Acompañados por familiares de pacientes de salud mental los trabajadores del INPAT esta mañana mantuvieron un encuentro con autoridades de SEROS frente a la inminente baja de la prestación que dejaría sin atención a un centenar de pacientes y dejaría en la calle a 140 trabajadores.
Sin lograr un acuerdo, el grueso de los manifestantes ingresó por la fuerza al edificio con pancartas y bombos, en el cruce con la policía hubo forcejeos y según reporto el gobierno provincial un policía fue lesionado. Se dispuso el desalojo preventivo de los trabajadores de la obra social que permanecían en el edificio como ocurrió en otras dependencias públicas.
Y desde entonces el edificio permanece “tomado”. Después del mediodía el rumor que preocupó a los trabajadores es que pretendieran desalojarlos con Infantería aunque eso no ocurrió.