Tal como informó este domingo El Patagónico, la mujer de 42 años que golpeó a su hija de 11 en una vivienda de Km 8, fue sometida a proceso y recuperó la libertad, pero con la prohibición de acceso y acercamiento a la menor por el lapso de 72 horas mientras avanza en forma paralela la Justicia de Familia.
Hay que recordar que el ataque se registró durante la madrugada del domingo en un domicilio de la calle Base Belgrano al 100, en el barrio Don Bosco, donde alquilaría la familia. Justamente, la dueña del inmueble fue quien escuchó los desgarradores gritos de la menor y no dudó en alertar a la policía de la comisaría de Km. 8.
Al arribar al lugar, los uniformados encontraron a la niña recostada sobre el sillón del living y sin signos vitales debido a la golpiza recibida por parte de su propia madre. Ante la urgencia del caso, trasladaron a la víctima hasta el Hospital Alvear.
En el camino la cabo Jessica Ñiripil, quien durante la mañana del sábado participó de un curso de RCP (Reanimación Cardiopulmonar), puso en práctica sus conocimientos y reanimó a la menor. Esta quedó internada en observación por 48 horas en el Hospital Regional.
En tanto, la madre intentó huir del lugar y en su intento hasta agredió a un efectivo, pero fue apresada. La mujer, identificada con las iniciales de L.P.G., el mismo domingo fue sometida a la audiencia judicial.
Por pedido de la funcionaria fiscal, Micaela Haro, la detención fue declarada legal y la imputó por los delitos de lesiones leves agravadas por ser descendiente, en concurso real, con desobediencia judicial.
La acusada recibió la asistencia legal del defensor púbico Ivo Di Taranto y finalmente el juez Alejandro Soñis imputó a la madre golpeadora por los delitos requeridos por la Fiscalía y le dictó la medida de prohibición de acceso y acercamiento por 72 horas. De inmediato, el magistrado dio intervención al Juzgado de Familia de esta ciudad.