El presidente del Club Portugués, Alejandro Paillahuala, brindó su versión de los hechos tras haber sido sindicado por los padres de un adolescente, quien ofició de árbitro en un partido de rugby entre mujeres, como responsable del robo de un teléfono iPhone 6 así como 600 pesos en efectivo. Calificó la denuncia como un hecho de "muy mala intención" por sindicar a una persona sin tener pruebas.
En tal sentido, se manifestó indignado por haber sido vinculado a un hecho de estas características porque "realmente no es así" y en este sentido, aseveró que "por ahí muchas veces los padres creemos en nuestros hijos y ellos muchas veces suelen mentir o decir las cosas como no son realmente", afirmó en contacto con Radio Del Mar.
El dirigente detalló que a raíz de que los vestuarios se encontraban ocupados porque se estaba por disputar un partido es que "uno de mis allegados, el manager del club, le facilita la secretaría" al joven para que pueda cambiarse ya que había sido contratado para oficiar de árbitro. "Ese día teníamos una delegación de 60 chicos de El Bolsón. Qué sé yo si algún chico lo abrió, se lo sacó o se le cayó", afirmó, sin embargo, reconoció que el hecho debe haber existido pero "no sabemos quien fue y tampoco nos podemos hacer responsable de todos los bolsos de toda la gente que va al club".
"Yo le dije a la mamá que haga la denuncia, porque el celular tiene un sistema que si vos lo encendés, podes detectar donde está", indicó y aseguró que si el joven no tiene las posibilidades de volver a comprarse un equipo nuevo el club va a "reconocerle" un equipo para que no se quede sin celular.
Finalmente, aclaró sobre la sustracción de dinero que "es la plata que yo le dí, los 500 pesos que le pagué para arbitrar que fue posterior a este hecho. Estamos ante una mentira. Esto quiero que quede claro".