La denuncia contra el suboficial Luis Varas, quien se desempeña en la Policía Comunitaria, llegó a la Agencia de Delitos Sexuales del Ministerio Público Fiscal en procura de confirmar si hubo intención de abuso sexual en el manoseo que denuncia la víctima, Rosa Gómez Esparza, cuando el policía la presionaba para que confesara dónde estaba el dinero que supuestamente le había robado.
En tanto, El Patagónico pudo conocer que el cuerpo del sumario administrativo contra el empleado policial que se realiza en Asuntos Internos de Comodoro Rivadavia sigue sumando fojas e incluso se pidió al jefe de Policía, Juan Ale, el pase a disponibilidad preventiva del suboficial, mientras continúa la investigación.
Gómez Esparza, la cuidadora de la madre del policía Luis Varas, lo denunció públicamente ante este diario y también radicó la denuncia ante la Seccional Primera.
Sostuvo que el policía se presentó en la tarde del miércoles 26 de octubre en la vivienda que ella alquila en la calle Fontana, en la zona de La Loma, frente a la casa de la madre del policía.
La mujer aseguró que el suboficial la acusaba de haberle robado una suma de dólares. En su denuncia, Gómez Esparza asegura que Varas la arrastró por el suelo y que le colocó un cuchillo en el cuello para que dijera dónde guardaba el dinero. El policía además la habría manoseado, golpeado y cortado un dedo de la mano.
Al momento de la denuncia, la víctima evidenciaba moretones en su cuerpo y tenía vendada la mano derecha.
Según la denunciante, veinte minutos después de haberla privado de la libertad en su propia vivienda, el policía regresó a pedirle disculpas. En ese momento estaba de testigo el dueño del inquilinato donde reside la mujer y este señala que Varas reconoció que se había equivocado ya que había encontrado en su casa el dinero que buscaba.
La denuncia en la Fiscalía ha sido caratulada inicialmente como amenazas y lesiones a lo que se le sumó tras una nueva entrevista a la víctima la posible comisión del delito de abuso sexual.
- 24 noviembre 2016