Retirarán del Chenque 4 mil metros cúbicos de arcilla

Los estudios marcan que esa es la cantidad de material que se debe sacar para poder estabilizar los bloques que se encuentran en peligro de desprenderse. Será una de las medidas paliativas hasta que se consigan los fondos para la obra del aterrazamiento en la parte lindera a la ruta Nacional 3.

La misión de estabilizar el cerro Chenque está en marcha. Las autoridades decidieron que retirarán 4 mil metros cúbicos de material para poder quitar los bloques que están en peligro de desprendimiento. Así quedó establecido en la reunión de la Comisión de Tierra y Transporte del Concejo Deliberante.

Estuvieron presentes Julio Otero, jefe de la delegación Chubut de Vialidad Nacional; Ricardo Gaitán, secretario municipal de Control Operativo; Daniel González, subsecretario de Ambiente y Maximiliano López, secretario de Infraestructura de la Municipalidad de Comodoro Rivadavia.

El desprendimiento del cerro Chenque encendió las alarmas y llevó a que se coordine un plan de acción ante la reducción de calzada en un tramo de la ruta Nacional 3. En este sentido, las autoridades analizaron los informes del Ejército Argentino, el área de Topografía y el Laboratorio de Suelo de la Universidad Nacional de la Patagonia San Juan Bosco (UNPSJB).

Los trabajos marcaron que para alcanzar la pendiente que permita estabilizar ese sector del cerro es necesario retirar 4 mil metros cúbicos de material.

Ahora quedará en manos de Vialidad Nacional elaborar un plan de trabajo para retirar el material que tiene un alto peligro de desplazamiento. Asimismo, la Municipalidad y la casa de altos estudios continuarán con las tareas de monitoreo en el cerro Chenque.

Los profesionales fotografían el frente y los distintos sectores mientras toman registros desde arriba para observar cómo son los diseños de fractura. “Esto lo empezamos hacer el viernes pasado. Tenemos fotos para ir comparando y ver si el estado de fractura se mantiene estático, si hay algún cambio o vemos si hay alguna alerta para tener en cuenta. Así y todo, es un monitoreo de un proceso que de por sí es rápido y acelerado, a diferencia de otros fenómenos que ocurren en Comodoro, que son más simples de predecir cómo se mueven”, explicó el geólogo José Allard, quien lidera los trabajos de investigación.

Ahora la tarea se basará en colocar puntos fijos. “A los pocos días que llovió hicimos lo que pudimos porque no se podía acceder físicamente a algunos lugares. La idea es poner puntos fijos para que las fotos tengan un parámetro de comparación en el tiempo”, subrayó.

Fuente:

Notas Relacionadas

Dejá tu comentario

Las Más Leídas del Patagónico