Esta decisión profundiza el ajuste sobre el sector, ya que el bono ha perdido más del 50% de su poder adquisitivo debido a la inflación acumulada en los últimos 15 meses.
De acuerdo con cálculos del Centro de Economía Política Argentina (CEPA) de junio, si este bono se hubiera actualizado al ritmo de la inflación, como lo hacen los haberes previsionales desde abril de 2024, hoy debería ascender a $154.400, es decir, más del doble de lo que los beneficiarios recibirán en julio.
La confirmación del pago y el mantenimiento del monto se oficializó a través del Decreto 444/2025, publicado hoy en el Boletín Oficial, con las firmas del presidente Milei, el jefe de Gabinete Guillermo Francos y la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello.
Este bono congelado de $70.000 alcanzará a quienes perciban prestaciones contributivas de la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses), la Pensión Universal para el Adulto Mayor (PUAM), y pensiones no contributivas por vejez, invalidez, madres de siete hijos o más, entre otras pensiones graciables.
El decreto especifica que el bono será de hasta $70.000 para aquellos que perciban el haber mínimo previsional. Para quienes superen ese monto, el bono cubrirá la diferencia necesaria para alcanzar la suma del haber mínimo más el bono.
Con los aumentos de haberes oficializados la semana pasada, los jubilados que perciban la jubilación mínima cobrarán en julio un total de $379.294,80 ($309.294,80 de haber mínimo + $70.000 de bono). Aquellos que perciban un haber superior al mínimo recibirán un plus proporcional para alcanzar la misma cifra de $379.294,80.