Una inspectora municipal de tránsito protagonizó un hecho que generó conmoción en la comunidad de Villa La Angostura: chocó contra un camión del propio municipio mientras conducía en estado de ebriedad. El test de alcoholemia arrojó un nivel de 1.92 gramos de alcohol por litro de sangre.
Tras conocerse lo sucedido, el Ejecutivo municipal actuó con rapidez, iniciando un sumario administrativo interno y separando de manera preventiva a la agente de sus funciones habituales.
Según Diario Andino, la situación no solo es grave por el hecho en sí, sino también por el rol que desempeñaba la trabajadora: era parte del cuerpo encargado de controlar a quienes infringen las normas de tránsito. Ahora, enfrenta posibles sanciones severas, incluida la exoneración del cargo.
El Ejecutivo basó su accionar en la Ordenanza N°1609, que en su artículo 58 establece que los agentes municipales no deben realizar, propiciar ni consentir actos que vayan en contra de la moral, la urbanidad o las buenas costumbres.
Además de las medidas disciplinarias, el municipio pidió la intervención de la médica laboral para que la trabajadora reciba acompañamiento profesional, en caso de que se detecte una situación de consumo problemático que requiera atención específica.
Por ahora, la inspectora continúa separada de sus funciones, a la espera de las resoluciones que surjan del sumario. Desde el municipio dejaron en claro que este tipo de conductas no serán toleradas, y que el accionar de los empleados públicos debe estar a la altura de la responsabilidad social que implica su cargo.