Iván Torres, una desaparición y varios testigos asesinados

El 2 de octubre de 2003 desapareció Iván Torres, luego de haber sido detenido en la Seccional Primera de Comodoro Rivadavia. Desde ese día nada más se supo de él, pese a que hay catorce policías imputados por desaparición forzosa.
Torres había ingresado a la seccional el 26 de setiembre respondiendo a un pedido de captura, imputado por un robo agravado y según la policía fue liberado tras comprobarse que la solicitud había sido levantada y que ya no se le requería el comparendo.
En esta causa, la Corte Interamericana de Derechos Humanos falló contra el Estado argentino por la desaparición forzosa del joven. Fueron varios los elementos que se tuvieron en cuenta para llegar a esta resolución.
Hay que recordar que durante estos años han fallecido -algunos de ellos en extrañas circunstancias- varios amigos del desaparecido y testigos del proceso de detención de Torres, entre ellos Diego Alvarez, David Alberto Hayes, Dante Caamaño, Miguel Angel Gajardo, Walter Mansilla, Juan Pablo Caba y Gastón Vara.
El 7 de enero de 2005 David Alberto Hayes fue apuñalado en la alcaldía policial, en una supuesta reyerta durante un recreo. El preso era uno de los testigos protegidos de la causa y había manifestado su deseo de declarar ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
En tanto, Dante Caamaño falleció de un impacto de bala en la cabeza el 23 de mayo de 2005 por causas no esclarecidas.
Mientras, Juan Pablo Caba, otro testigo de la causa, fue baleado en un confuso incidente el 7 de marzo de 2011, y murió después de 15 días de agonía en el Hospital Regional. Tenía orden de protección sobre su persona por parte de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, desde julio de 2006.
Hoy el único testigo vivo es Miguel Angel Sánchez, quien estuvo detenido con Torres en la Seccional Primera. Sin embargo, María Leontina Millacura Llaipén, la madre Torres, teme por su vida.

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