El juez de Primera Instancia, Eugenio Romanini, imputó esta semana a cinco personas por el femicidio de Sofía Delgado, la joven de 20 años cuyo cuerpo fue encontrado después de 15 días de búsqueda. Desde la fiscalía a cargo del caso afirmaron que "la sacrificaron".
Parcialmente en línea con lo que afirmó el abogado de la familia de Sofía Delgado -para quien a los acusados "se les fue de las manos" el ataque a la joven-, el fiscal de Santa Fe, Carlos Ortigoza, aseguró este miércoles que el episodio fue "premeditado".
La hipótesis de Ortigoza se sostiene en la información extraída del celular de Alejandro Bevilacqua, uno de los imputados, en los que figuran búsquedas en Google sobre "cómo matar y esconder a una persona".
También constan los chats que el hombre compartía con los otros cuatro imputados, en los que "hablan de Sofía, dicen que nadie la va a reclamar luego de sacrificarla y descargar su ira; eran mensajes y links de webs con mujeres teniendo relaciones atadas", reveló el fiscal de Santa Fe.
Bevilacqua está imputado como partícipe del homicidio, al igual que Eduardo Mordini y Brian Bauman, por lo que el juez Romanini les dictó 180 días de prisión preventiva.
Mientras tanto, Miranda Leguizamón y Natalia Palavecino están imputadas por encubrir el femicidio de la joven, cuyo cuerpo apareció en una zona rural de Ricardone, en el departamento San Lorenzo. Las mujeres tienen prohibido contactarse con la familia de Sofía Delgado.
Durante una audiencia realizada en las últimas horas Ortigoza pidió la imputación de los cinco involucrados por "homicidio agravado por la premeditación de dos o más personas y por violencia de género".
LO QUE CADA UNO HIZO EN EL CRIMEN
La hipótesis de Ortigoza sería que Bevilaqua subió a Sofía Delgado a su auto -un Peugeot 308- el 30 de octubre a las 9.30 del miércoles 30 de octubre frente a su casa en el barrio Díaz Vélez, de San Lorenzo, a 30 kilómetros de Rosario.
Bevilaqua llevó a Sofía a un galpón ubicado en Corrientes al 100, en la localidad de Puerto General San Martín, que es propiedad de Mordini y es también el lugar donde mataron a la joven y quedó el auto una vez que se reportó su desaparición.
De hecho, Mordini intentó desligarse del femicidio avisándole a las autoridades de Santa Fe que el auto de su amigo Bevilaqua estaba en su taller y luego, ya detenido, confesó que vio muerta a la joven pero aseguró que no tuvo que ver con su asesinato.
El fiscal consideró que Mordini y Bevilaqua mataron juntos a Sofía. El tercer imputado, Bauman, fue quien ató de pies y manos a la joven y la metió en una bolsa negra que recubrió con un aislante térmico.
El cuerpo apareció adentro de una bolsa de arpillera en una zanja al costado de un camino de tierra a 700 metros de la curva del Camino de la Cremería, en la localidad de Ricardone.