Después de imponerse en la interna de Juntos por el Cambio en las PASO provinciales, el radical Leandro Zdero dio el batacazo en las elecciones de este domingo y volvió a poner en jaque al actual gobernador de Chaco, Jorge Capitanich, que apostaba a su reelección en primera vuelta con el Frente Chaqueño. Con casi el 60% de las mesas escrutadas, alcanzaba el 46% de los votos y superaba al actual mandatario, que obtenía el 40% y lo llamó para reconocer la derrota en primera vuelta.
Así, Chaco pasa a manos del radicalismo después de 16 años, cuando en 2007 el entonces mandatario Roy Nikisch (UCR) perdió la elección con “Coqui”. Acompañado de la candidata a la presidencia de Juntos por el Cambio, Patricia Bullrich, y por el gobernador de Corrientes, Gustavo Valdés, los senadores Carolina Losada y Luis Naidenoff y Ricardo López Murphy, en el búnker de Zdero todo era felicidad este domingo a la noche.
La chance de lograr la gobernación en primera vuelta había puesto a soñar a los radicales que, tras el triunfo de Maximiliano Pullaro en Santa Fe, y el del propio Valdés en su provincia, también buscaban dar el batacazo y sumar una provincia más a Juntos por el Cambio.
Justamente, este domingo minutos antes de las 10, cuando la sensación térmica alcanzaba los 34°, el candidato de JxC hizo su ingreso a la Escuela Primaria 336 “Enrique Banchs” de Resistencia para votar. Al salir del cuarto oscuro fue aplaudido por los vecinos y autoridades de mesa. Luego, en diálogo con los medios, hizo hincapié en la concurrencia. “El voto es el arma más poderosa que tienen los ciudadanos. Todos esperamos que se defina en primera vuelta, pero vamos a esperar. Hoy los chaqueños tenemos una oportunidad única de hacer historia. Hay un fin de ciclo, fueron demasiados años de mentira”, afirmó. Luego, el escrutinio le daría lo que tanto quería: la victoria