Este miércoles se concretó -por pedido de la fiscalía- una nueva audiencia de revisión de la prisión preventiva que cumple el imputado Nicolás Fausto Girotti por lo que ocurrió en Rada Tilly el pasado 9 de febrero.
Tras la solicitud de Jazmín Abraham, la jueza Lilian Bórquez la avaló para asegurar el proceso, en tanto se mantienen los peligros procesales por los cuales se le dictó anteriormente la prisión preventiva, y también porque ya se ha presentado acusación pública del caso y se ha fijado como fecha para su tratamiento el próximo 29 de noviembre en la audiencia preliminar.
Entendió la fiscal que “existen elementos de convicción suficientes que permiten acreditar tanto la materialidad como la autoría del hecho”, por parte de Girotti, considerando que se presume que no se va a someter al proceso, por la falta de arraigo y porque el Juzgado de Familia dictó una medida de exclusión del hogar de su anterior pareja, razón por la cual no posee red de contención familiar.
Girotti no es de la ciudad y no cuenta con trabajo estable. Se ganaba la vida como malabarista, resaltó Abraham, recordando la pena que se espera como resultado del proceso, en caso de recaer condena de cumplimiento efectivo.
Por su parte, la defensora pública María de los Angeles Garro no se opuso a la medida de coerción solicitada por la fiscalía ya que –admitió- su asistido no tiene arraigo y no se pudo lograr un domicilio para solicitar una morigeración de la medida de coerción.